Ecuador, en el ejercicio de la presidencia pro tempore del G77+China desde el viernes 13 de enero, ha puesto como objetivos prioritarios estimular el financiamiento para los países en vías de desarrollo y crear conciencia sobre el daño ocasionado por los paraísos fiscales.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró que “se pueden hacer cosas concretas, como por ejemplo, se puede trabajar el financiamiento para el desarrollo, algo en lo que ya venía trabajando el G77+China, pues este es uno de los cuellos de botella para los países en vías de desarrollo y también se puede trabajar en la lucha contra los paraísos fiscales”.

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De igual manera, en un conversatorio con medios de comunicación desarrollado en la ciudad de Guayaquil, Correa evaluó el surgimiento de algunas fuerzas en contra de los paraísos fiscales y puso como ejemplo la apertura del presidente de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, y la posición fijada por Alemania al respecto.

“En Alemania hay un gran movimiento contra los paraísos fiscales. Se están juntando fuerzas contra esta pandemia de la humanidad, contra esta expresión del capital salvaje, sin rostro, sin patria, sin responsabilidades”, destacó el presidente.

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A pesar de que en el panorama internacional Venezuela preside el Grupo de los No Alineados (Mnoal), el gobernante ecuatoriano no se muestra muy optimista de que se pueda hacer mucho para alterar el orden mundial actual, considerándolo injusto e inmoral.

La presidencia del grupo G77+China es una de las más grandes distinciones internacionales que ha logrado Ecuador, después de la presidencia de la ONU que alcanzó el embajador Leopoldo Benítez durante la década de 1960.