Tras varios años de crisis, Ecuador tendrá elecciones en febrero de 2021. La muerte y los problemas financieros enlutaron al país.

¿Qué presidente recibirá la administración? ¿En qué manos se pondrá la esperanza de tantas familias golpeadas por la crisis financiera y la covid-19?

Las encuestas

A menos de cinco meses, ya las encuestas asoman en el panorama de Ecuador. Por una parte, se busca evaluar la gestión del presidente Lenin Moreno; y por otra, ir examinando hacia dónde va la preferencia popular entre los candidatos presidenciales. ¿Qué opinan las encuestas sobre la gestión de Lenin Moreno?

El Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) publicó un estudio sobre el panorama político y social del Ecuador. En el estudio, dado a conocer el pasado mes de agosto, se consultó sobre la evaluación a la gestión del Gobierno Nacional y del presidente. En esta pregunta, el primer mandatario recibió un 83,4 por ciento de desaprobación y solo un 11,8 por ciento de apoyo a su gestión.

Otra de las preguntas realizadas fue sobre el trabajo del presidente y sus ministros en la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. En esta consulta, el 71,7 por ciento de los ecuatorianos considera que el Gobierno pudo evitar muchas muertes en esta pandemia.

La consultora CEDATOS, por su parte, menciona que el presidente de la República tiene un nivel de aprobación del 9 por ciento y de credibilidad del 8 por ciento. De igual modo, la Asamblea Nacional tiene cifras record: 3 por ciento de aprobación y 2 por ciento de credibilidad. En cuanto al coronavirus, hasta las 08H00 de este sábado 19 de septiembre, 125.620 personas se han infectado con el virus en el país, con 1.491 nuevos casos confirmados en esa última fecha.

Otro dato interesante es que, sin ser presidente ni ocupar cargo alguno, Rafael Correa parece continuar en la preferencia de los ecuatorianos, de ahí que un titular del 14 de agosto de 2020, en el sitio digital Universo, haya expresado: “Candidato del correísmo lidera la intención de voto para presidenciales 2021, según CELAG”. Y, es cierto, cuando todavía el Consejo Electoral no había decretado la imposibilidad de Rafael Correa para postularse como vicepresidente –lo haría por Centro Democrático, con Andrés Arauz–, ya las encuestas lo mostraban como favorito en las intenciones de voto. CELAG ubicaba al candidato del correísmo como la principal opción electoral de los ecuatorianos para el año 2021 con el 31,4 por ciento de intención de voto. A pesar de la imposibilidad de Rafael Correa para postularse, ¿favorecerá a Andrés Arauz el hecho de haberlo tenido como fórmula?

Arauz, de 35 años, posee una larga trayectoria académica y de gestión en diferentes instituciones de la Administración Pública del Estado ecuatoriano. Licenciado en Economía y Matemáticas por la Universidad estadounidense de Michigan, máster en Economía del Desarrollo por FLACSO-Ecuador y doctorado en Economía Financiera por la Universidad Nacional Autónoma de México, Arauz fue director general del Banco Central de Ecuador entre 2011 y 2013 y luego se desempeñó como Subsecretario Nacional de Planificación y Desarrollo, y como director general del Servicio Nacional de Contratación Pública. En 2015 fue nombrado por Rafael Correa ministro de Conocimiento y Talento Humano, cargo desde el que dirigía la coordinación y supervisión de la ejecución de políticas, programas y proyectos de los ministerios de Educación, Cultura, Educación Superior, Ciencia y Tecnología.

¿Cuál fue la postura de Andrés Arauz con el gobierno de Lenin Moreno?

Durante el gobierno de Lenin Moreno, Andrés Arauz se apartó de los cargos institucionales y se volcó en su trayectoria académica. A finales de 2017, junto con un grupo de economistas, fundó el Observatorio de la Dolarización, una institución de pensamiento y reflexión en torno a temas económicos, en el que Arauz publicó artículos y análisis de forma regular. Asimismo, aprovechó este periodo para iniciar sus estudios de doctorado sobre Economía Financiera en la Universidad Nacional Autónoma de México.

Durante el gobierno de Moreno, Arauz alertó sobre violaciones a la Constitución y a la ley, y sobre el peligro de la dolarización en manos de Lenin Moreno.

El pasado 24 de agosto, en un texto que la agencia EFE tituló “Arauz, el 'hijo de la revolución' que trata de devolver el correísmo al poder”, el joven economista dijo: “Este es un momento muy duro para Ecuador, las familias ecuatorianas están pasándola muy mal. El 80 por ciento reciben menos de la mitad de lo que ingresaban antes de la pandemia y creo que sabemos cómo aplacar el impacto de esta crisis. Por eso nos presentamos”.

Y agregó: “Venimos lamentablemente de un período plagado de persecución a quienes opinan distinto, de una judicialización de la política que no le hace bien a nuestro país, y actualmente lo que necesitamos es dejar esas diferencias a un lado y, sobre la base del pensamiento innovador y creativo, buscar soluciones que beneficien a toda la población. Prevalecerá el elemento patriótico, también demócrata. Vamos a respetar las libertades consagradas en nuestra Constitución, que son elementos fundamentales de nuestro proyecto como país. Eso estará siempre presente”. Interrogado sobre su cercanía a Rafael Correa y sobre las pasiones que genera dijo: “Correa fue clave para avanzar rápido con lo que (entonces) necesitaba nuestro país (…) Ciertos grupos que podemos llamar oligárquicos, muy comunes en nuestra América Latina, estaban acostumbrados no solo a ejercer el poder económico sino también el político de forma directa, descarada, y sacrificando las instituciones de la democracia para preservar sus monopolios. ¿Qué es lo que pasó? ¡No es que dejaron de ganar, sino que dejaron de mandar! Y ese cambio es el que generó traumas en ciertos segmentos de la sociedad acostumbrados a influir”.

¿Similitudes entre Bolivia y Ecuador? Washington y las piedras del camino.

Desde el sitio digital Rebelión, el periodista Jorge Elbaum muestra algunos elementos que en su opinión son reveladores: “En los últimos meses –dice Elbaum– el Departamento de Estado de EE.UU. ha desatado una ingente batería de iniciativas, en abierta coordinación con las élites locales, para interrumpir la reconfiguración de un bloque soberano de la hegemonía corporativa y financiera, apadrinada por las delegaciones diplomáticas de Washington”.

En opinión del periodista “Bolivia y Ecuador están inmersos en procesos electorales que tendrán gran impacto en América Latina y el Caribe, dado que el resultado de ambos comicios puede alterar el tablero regional”.

El periodista cita un hecho significativo y es que un miembro de CLS-Strategies –se refiere a Brian Berry– ha visitado Bolivia y Ecuador en las últimas semanas. ¿Qué es el CLS-Strategies? Según la propia página de la institución, el CLS-Strategies “ayuda a los clientes a ganar donde más importa: en los pasillos del gobierno, en el mercado, o en el tribunal de la opinión pública”.

En Bolivia –según el periodista de Rebelión– “la misión de CLS-Strategies era ofrecer una planificación destinada a mejorar la imagen de Añez y socavar la del MAS”. Entre sus antecedentes, Berry acredita su participación en la campaña electoral que no pudo impedir la victoria en México de Andrés Manuel López Obrador. CLS-Strategies es una consultora estadounidense con sede a pocas cuadras de la Casa Blanca y labora creando lobbies y cabildeos para gobiernos y empresas, además de estrategias digitales y empresariales, según su página web.

Trabajó para el expresidente colombiano Álvaro Uribe, además de campañas electorales de México, Argentina, Guatemala y Ecuador, entre otros países. Además de Brian Berry, ¿quién viajó a Ecuador?

De acuerdo al texto de Rebelión, publicado el pasado 24 de agosto, “el rol que cumplió Berry en La Paz ha sido replicado por Paul John Manafort en Quito”.

Manafort fue jefe de campaña de Gerald Ford, Ronald Reagan y George H. W. Bush. En la primera parte de 2016, cumplió esa misma función para Donald Trump, para luego convertirse en uno de sus delegados dedicados a las operaciones especiales. De acuerdo al periodista, Manafort mantuvo varias reuniones con Lenin Moreno para solicitar al primer mandatario el fin del asilo otorgado por Correa a Julian Assange en 2012.

El 11 de abril de 2019, por decisión de Moreno, Ecuador retiró la nacionalidad ecuatoriana y el asilo concedido a Assange. En forma inmediata, fue detenido por las autoridades británicas –dentro de la Embajada del Ecuador en Londres– como respuesta al pedido de extradición del gobierno estadounidense.

Rebelión asegura que a Quito viajó –designado como embajador de Estados Unidos– un experimentado diplomático, Michael Fitzpatrick, quien arribó a Ecuador el último 19 de junio, y cuya delegación diplomática se constituyó de inmediato en el cuartel general de los asesores de Edwin Moreno, candidato a presidente por la agrupación Ecuatoriano Unido y hermano de Lenin. En forma paralela, varias consultoras de Quito y Guayaquil han sido contratadas para promover la estigmatización del correísmo.

Los tres estadounidenses que han visitado Bolivia y Ecuador

Rafael Correa y las elecciones de Ecuador

En enero, Rafael Correa escribía en Twitter: “Una prensa algo seria estaría averiguando cómo un expresidente puede tener 30 juicios penales, vicepresidente preso, canciller con orden de prisión, secretario jurídico, ministros, etcétera sin haber encontrado un centavo mal habido, ninguna cuenta secreta, excepto las del propio Gobierno actual, que con descaro encubren. (...) Objetivo: impedirnos participar en próximas elecciones. Hablan de sobornos de Odebrecht, pero ni siquiera la acusan”.

La presencia de Rafael Correa –o la influencia– parece una constante en todos los medios informativos. ¿Podrá esto beneficiar al candidato Andrés Arauz? ¿Conseguirán fabricar algo en su contra?

Un hecho revelador publicóla prensa el pasado 31 de agosto: Un exagente de inteligencia de Ecuador alega que le ofrecieron hasta “una nueva identidad” a cambio de involucrar a Correa en el “Caso Balda”.

Si en Bolivia los sectores de derecha lo hacen, ¿en Ecuador lo harían?

Las elecciones se efectuarán en pocos meses. ¿Hay pruebas de los motivos por los que viajan las figuras de poder estadounidenses a Latinoamérica? El sitio digital: quintopoderconurbano.com develó, el pasado 15 de agosto, un titular sugerente: “Bolivia: Gobierno de Añez contrató por 90 mil dólares a la consultora CLS-Strategies para 'lavar su imagen'”. Lo interesante es que el propio sitio publica fotos del contrato y hace un vínculo al sitio digital donde se muestra el mismo: https://efile.fara.gov/docs/6766-Exhibit-AB-20191211-1.pdf

De última hora

El partido Centro Democrático dio a conocer que Carlos Rabascall acompañará a Andrés Arauz e inscribirá su candidatura como vicepresidente. Rabascall ocupará el puesto que no pudo aceptar el exmandatario Rafael Correa y en cuyo gobierno el ahora candidato a vicepresidente tomó protagonismo al ser uno de los rostros del canal estatal Ecuador TV.

El expresentador de televisión estudió también en el colegio San José La Salle, de Guayaquil, y realizó cursos de Finanzas en el IDE; participó, además, en el Programa de Gobernabilidad y Gerencia Política de la Universidad Católica de Guayaquil, con el auspicio de la George Washington University.

¿La dupla Arauz-Rabascall tendrá que saltar las piedras que, según varios sitios digitales, son fabricadas en EE. UU.? Lo cierto es que, según las encuestas, si ahora mismo fueran las elecciones, los candidatos del Partido Centro Democrático fueran los vencedores. Ecuador, uno de los países más maltratados por la pandemia –y que, según los sondeos, no la ha enfrentado bien– tendrá en sus manos una nueva elección.