Al menos 13 organizaciones sociales denunciaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en Washington, capital de Estados Unidos, los asesinatos y las amenazas que sufren los líderes sociales en Colombia.

"El Gobierno de Colombia negó la existencia de grupos paramilitares con el argumento de no concederles un estatus político", afirmó el representante del Comité de Solidaridad con los Presos Políticos, Franklin Castañeda, quien aseguró que la presencia de paramilitares le está costando a Colombia "la paz y la vida". 

"Los grupos paramilitares no tienen un estatus político, porque nunca se han enfrentado al Gobierno colombiano", agregó Castañeda y resaltó: "El paramilitarismo está incrementando su presencia en el territorio colombiano al tratar de ocupar los espacios que está dejando la guerrilla". 

Los paramilitares controlan los recursos de primera necesidad en comunidades rurales y esto impacta en las comunidades más vulnerables", denunció el defensor de derechos humanos de la Comisión de Justicia y Paz, Danilo Rueda. 

Por su parte, el Gobierno de Colombia no quiso entrar en discusiones sobre los paramilitares durante las audiencias.

El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, afirmó que "la discusión sobre si existe o no paramilitarismo en Colombia no salvará a más defensores de derechos humanos" e insistió en que el Gobierno está trabajando para que no se produzca ni una muerte más de líderes sociales. 

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Este martes se celebra el 161 periodo de sesiones de la CIDH y durante las audiencias se abordan temas como la falta de garantía de no repetición de crímenes contra integrantes de organizaciones sociales y la petición al Gobierno colombiano de crear una fuerza pública para la paz.