El autodenominado Estado Islámico (Daesh en árabe) ejecutó al menos a 30 personas, entre ellos niños, que habían sido secuestrados en la provincia de Ghor, al oeste de Afganistán.

"Nuestras fuentes de inteligencia y muchas personas en la zona donde tuvo lugar la masacre nos han confirmado que alrededor de 30 civiles han sido asesinados por Daesh, todos han muerto por disparos", dijo a EFE el portavoz del gobernador de Ghor, Abdul Hai Khtibi.

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El portavoz acotó que la cifra de muertos podría ser mayor, en un atentado perpetrado  por Daesh en represalia por la muerte de uno de sus comandantes, a manos de las tropas afganas.

"Nuestras fuerzas de seguridad con la ayuda de los locales llevaron a cabo una operación y mataron ayer a un comandante de Daesh. A cambio, los combatientes de Daesh secuestraron alrededor de 30 aldeanos, en su mayoría pastores", apuntó el gobernador de Ghor, Nasir Khazeh, a AFP.

"Sus cadáveres fueron encontrados por la gente local esta mañana", añadió Khazeh.

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Las autoridades han recuperado, hasta los momentos, 27 de los cuerpos de los civiles, quienes fueron capturados mientras recogían leña y trasladados luego a valles cercanos controlados por el grupo terrorista.