El presidente de Ecuador, Rafael Correa, criticó el viernes la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de no reducir la producción de crudo para estabilizar los precios en el mercado internacional.

A juicio del mandatario ecuatoriano, la decisión tiene motivos geopolíticos ya que “es incomprensible” y busca “perjudicar a Irán, a Rusia, Venezuela, y posiblemente a Ecuador, y beneficiar a Estados Unidos en un año electoral”.

Tras participar en la Cumbre sobre el Cambio Climático que tiene lugar en París, Francia, Correa reiteró que no tiene sentido la postura adoptada por la OPEP en la reunión de Viena: "no tiene sentido, es una incoherencia".

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“Se dice que porque hay sobreoferta de petróleo, el precio se ha desplomado, por lo que obviamente la solución es disminuir la sobreoferta, pero no, dicen que las condiciones del mercado han cambiado y que no sirve de nada hacer eso”, comentó.

El dignatario considera que si los países integrantes del cartel petrolero decidieran reducir apenas en un dos por ciento la producción mundial de crudo, los precios se recuperarían fuertemente. “La única explicación es geopolítica, que quieren hacer tambalear a ciertos países como Rusia e Irán”, reiteró.

Advirtió además que Ecuador afrontará condiciones económicas extremadamente graves, y tendrá que tomar medidas para controlar de mejor manera el sector externo, si los precios del crudo siguen bajando.

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