El 23 de junio de 2016 se realizó un referendo consultivo sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE), en el que el "Sí" obtuvo un 52 por ciento de los votos ante un 48 por ciento.

Un año tras el brexit varias han sido las situaciones que se han presentado como consecuencia de la consulta.

Inicio de las negociaciones

El pasado 19 de junio se inició en Bruselas la primera reunión oficial para las negociaciones tras brexit, en el cual el Gobierno británico ha tenido que suavizar sus exigencias.

Luego de la activación del artículo 50 del Tratado de la Unión Europea, este lunes se realizó el primer encuentro en el que se acordó el calendario para las próximas reuniones que serán una vez cada cuatro semanas (17 de julio, 28 de agosto, 18 de septiembre y el 9 de octubre). 

La UE y Reino Unido esperan tratar los asuntos más importantes para ambos, materia económica y los derechos de los europeos, y de esa manera acabar con la incertidumbre que viven los ciudadanos.

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May pierde la mayoría absoluta del Parlamento

En las recientes elecciones parlamentarias la primera ministra británica Theresa May no obtuvo la mayoría absoluta, así que tuvo que recurrir a la unión con el Partido Unionista Demócrata de Irlanda del Norte para gobernar en minoría. 

Esta unión ha afectado directamente el proceso del brexit, debido que May esperaba realizar un proceso "duro", sin embargo, con esta coalición ahora tendrá que enfrentar un "brexit blando", lo que interfiere en las negociaciones.
 
Lo que se confirma con la última declaración de la primera ministra en la que aseguró que los europeos con cinco años de residencia en Reino Unido podrán permanecer.

Naciones apuestan a la permanencia en la Unión Europea

Escocia e Irlanda han evidenciado su deseo de mantenerse en la Unión Europea, por lo que apuestan a una consulta interna, dando como consecuencia la separación de Reino Unido.

Escocia repudia el rechazo del Gobierno británico a una consulta interna sobre su salida del bloque, mientras que Irlanda teme que Reino Unido establezca una frontera "dura" entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte. 

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Incertidumbre en los británicos

La ciudadanía británica aún desconoce cuál será su posición tras el brexit, a pesar de que ha pasado un año desde su consulta. 

Aunque el Gobierno no frena el proceso, los británico se mantienen en incertidumbre, tanto que algunos desconocían que las negociaciones durarían dos años. Por esto se espera, que las negociaciones en primera instancia aclaren y pacten sobre los ciudadanos.