Los empresarios argentinos Hugo y Mariano Jinkis rechazaron este miércoles ser juzgados en Estados Unidos (EE.UU.), luego de ser notificados de la llegada del pedido de extradición bajo cargos de corrupción en la FIFA. 

Actualmente, los Jinkis (padre e hijo) están en prisión domiciliaria. Son los dueños de Full Play, una empresa de marketing y transmisión de fútbol que tenía los derechos de difusión de las eliminatorias mundialistas sudamericanas y del torneo Sudamericano Sub-17 celebrado en marzo en Paraguay. 

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Alejandro Burzaco se declaró el 31 de julio no culpable ante un tribunal de Nueva York por los delitos de extorsión, lavado de dinero y fraude electrónico y pagó una fianza de 20 millones de dólares para quedar en libertad vigilada.  

El juez le impuso al empresario de marketing deportivo llevar un dispositivo electrónico y no salir de Nueva York y Long Island. 

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