Las autoridades de Bosnia Herzegovina expresaron este jueves su preocupación tras el asesinato de dos militares en la capital del país, a manos de un hombre supuestamente vinculado al terrorismo.

El ataque calificado como un crimen de estado, ha obligado a reforzar, en sus niveles más altos, las medidas de seguridad en la nación balcánica ante la presunta amenaza de grupos que pretenden sembrar el terror en la población.

Los hechos confirman que un sujeto identificado como Enes Omeragic, supuesto integrante del movimiento salafista bosnio, disparó con un fusil a dos miembros del ejército del país y un transporte colectivo, luego de abandonar una casa de apuestas.

Bosnia: Dos soldados muertos y tres civiles heridos en el ataque de un desconocido gritando “Alá es grande”, vía RT pic.twitter.com/DkvaBtcozR

— teleSUR TV (@teleSURtv) noviembre 18, 2015

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Sin embargo, la agencia serbobosnia SRNA, afirma que el autor del crimen habría exclamado "Alá es grande" mientras accionaba su arma contra los soldados, aunque posteriormente se quitaría la vida en su residencia en Sokolj, Sarajevo.

De acuerdo al primer ministro bosnio, Denis Zvizdic, aún no se puede decir nada sobre la investigación. “Las agencias están indagando y nosotros no detendremos nuestras actividades programadas. Continuaremos cumpliendo las misiones y labores asignadas por ley”.

Un informe difundido en junio pasado, reveló cual sería la situación del autodenominado Estado Islámico (EI) en el viejo continente. El documento aseguró que varios combatientes bosnios que lucharon en grupos extremistas, estaría formando redes militantes que amenazaban directamente a la seguridad de la nación.

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