La Corte Suprema de Justicia de Colombia tumbó el fallo que señalaba al profesor Miguel Ángel Beltrán, perseguido desde el 2009 por su supuesta vinculación a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP) y sindicado por el delito de rebelión.

Pese a que Beltrán había recuperado su libertad en junio de 2011, luego de ser absuelto por un juez Especializado de Bogotá, quien determinó que el profesor no había incurrido en concierto para delinquir agravado y rebelión, un fallo de segunda instancia de la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá lo condenó, en 2014, a 100 meses de prisión por el delito de rebelión.

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El jurista argumentó que las pruebas halladas durante el operativo en el que se abatió al jefe de las FARC, alias Raúl Reyes en mayo de 2008 en Ecuador no podían tomarse en cuenta puesto que no se respetaron la cadena de custodia.

Desde entonces fue perseguido y enviado a la cárcel La Picota en Bogotá, desde donde continuó su actividad política y académica.

En julio de 2014 la Procuraduría General destituyó e inhabilitó por 13 años para ejercer cargos públicos al docente universitario tras considerar que existían pruebas para inferir que entre julio de 2003 y mayo del 2009 escribió  comunicados y adelantó tareas políticas dentro del grupo armado ilegal. 

Aquí las primeras declaraciones de Betrál tras su liberación a la Agencia Prensa Rural de Colombia