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  • Entre los principales síntomas están el dolor abdominal, diarrea, vómito, y fiebre, así como la coloración amarillenta en la piel y ojos.
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    Entre los principales síntomas están el dolor abdominal, diarrea, vómito, y fiebre, así como la coloración amarillenta en la piel y ojos.

El origen de la hepatitis aguda infantil continúa siendo desconocido, pero los especialistas estudian varias hipótesis.

A inicios de abril pasado, Reino Unido notificó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la detección de unos diez casos de hepatitis aguda grave en niños, de causa desconocida; sin embargo, para el 15 de ese mes, el ente publicó una alerta.

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Para el 27 de mayo pasado, el ente ya registraba 650 casos de hepatitis infantil aguda de origen desconocido en al menos 33 países. De ellos, en ese momento, nueve niños murieron y otros 38 necesitaron recibir un trasplante de hígado.

La OMS precisó que estos casos se han reportado en Reino Unido, donde hay más contagios, Estados Unidos (EE.UU.), Japón, España e Italia. En América Latina, algunos de los países donde también se ha informado la presencia de estos casos son Colombia, México y Argentina.

Ante esta situación, el Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC) y los Centros para Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU (CDC) se unieron para dar la alerta internacional.

¿Qué se sabe de la enfermedad?

El doctor Leandro Soares Sereno, citado en un artículo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), explicó algunos de los aspectos más relevantes en torno a esta enfermedad.

“La hepatitis es una inflamación del hígado. Hay diferentes etologías – es decir, causas – que llevan a esa inflamación, como una infección o una intoxicación por medicamentos o sustancias”, precisó.

Además, añadió que son más frecuentes los agentes infecciosos de los virus causantes de las hepatitis A, B, C, D y E. Se le puede considerar aguda cuando “la inflamación ocurre de manera rápida y abrupta”.

Entre los principales síntomas están el dolor abdominal, diarrea, vómito, y fiebre, así como la coloración amarillenta en la piel y ojos.

Origen desconocido

El origen de la hepatitis aguda infantil continúa siendo desconocido. De acuerdo con Soares, las pruebas realizadas en laboratorios excluyen que los casos reportados correspondan a las hepatitis virales usuales.

“En muchos casos, se constató una infección por adenovirus en los niños y el vínculo entre estos dos se investiga como una de las hipótesis sobre las causas subyacentes”, acotó.

Asimismo, el doctor detalló que “el adenovirus es un virus común que puede causar síntomas respiratorios o vómito y diarrea. En general, la infección tiene una duración limitada y no evoluciona a cuadros preocupantes, aunque se han registrado casos raros de infecciones graves por adenovirus que han causado hepatitis en pacientes inmunocomprometidos o personas sometidas a trasplantes”.

De acuerdo con lo que se informó en su momento, los niños que presentaron esta enfermedad estaban saludables anteriormente, por lo que no corresponden a la descripción dada.

Hipótesis

Sobre las hipótesis que se plantearon de posibles causas, algunas fueron descartadas tras conocerse los resultados de los casos estudiados.

- De los virus que causan la hepatitis: descartada porque ninguna muestra dio positiva para estos virus.

- Intoxicación por alimentos: no fueron hallados nexos en común con los casos.

- Relacionado con la Covid19: en algunos casos fue detectada la presencia del virus, siendo una línea de investigación. Además, la mayoría de los niños no tenían la vacuna contra el coronavirus, por lo que se descarta algún vínculo con esto.

Una posible causa, que todavía se está estudiando, es una infección por adenovirus, que corresponde a una familia de virus que puede ser transmitida de persona a persona con facilidad.  

En particular, algunas muestran revelaron la presencia del adenovirus tipo 41, también denominado adenovirus F41, cuyos síntomas suelen ser diarrea, vómitos, fiebre y problemas respiratorios.

Según el catedrático de Microbiología de la Universidad de Salamanca, Raúl Rivas, se trata de un “serotipo muy concreto de adenovirus entéricos y que normalmente causan síntomas intestinales, pero hasta ahora no se había visto que pudiera originar en niños sanos daños de este tipo tan frecuentes”.

Además, comentó que debe analizarse si se trata de un nuevo serotipo de adenovirus o no; si consiste en una mutación o sea un virus no descrito. Los especialistas todavía deben evaluar diversas hipótesis.

La OPS instó a mantener el monitoreo de la situación, ya que la causa que genera estos casos está en estudio. Sin embargo, para prevenir posibles contagios, recomiendan implementar medidas básicas de higiene como el lavado de manos y taparse la boca al toser o estornudar, evitando así la transmisión.


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