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Proceso de Paz en Turquía: ¿Dónde Estamos Ahora?
Publicado 28 noviembre 2014



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Hace dos años, el gobierno Turco y el PKK, declararon un alto el fuego y expresaron su voluntad de resolver definitivamente el problema Kurdo mediante un proceso de negociación.

Durante casi dos años los funcionarios de inteligencia Turcos han estado en diálogo con Abdullah Öcalan, líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que está condenado a cadena perpetua. Como es bien conocido, el PKK es el principal movimiento en el Kurdistán de Turquía en representación de los derechos nacionales básicos de los Kurdos, como educación en la lengua materna, autonomía local y buscar la participación de los guerrilleros, que luchan con el Estado Turco desde hace tres décadas, en la política legal. Hace unos dos años, ambas partes, el gobierno Turco y el PKK, declararon un alto el fuego y expresaron su voluntad de resolver la cuestión Kurda, definitivamente, a través de un proceso de negociación. Esto es lo que se llama el "Proceso de Paz".

Sin embargo, hoy en día, todo el mundo está más o menos confundido acerca de hasta dónde hemos llegado en este proceso. La principal razón de la confusión es que, aunque el gobierno Turco no ha dado ningún paso significativo hasta ahora, ambas partes han sido, por lo general, leales al alto al fuego. De hecho, esta es una situación extraña que llama mucho la atención, y con razón, ya que no es ni la "paz", ni la "guerra".

Así que vamos a analizar los dos aspectos principales del Proceso de Paz. La primera de ellas ha sido la arena política local de Turquía, las posiciones respectivas del partido gobernante AKP y el movimiento Kurdo, que también está representado en el Parlamento por HDP (Partido Popular). El segundo aspecto del proceso de paz ha sido la situación en Rojava, es decir, el Kurdistán Sirio. Como los lectores que siguen los combates en Kobane , entre los Kurdos Sirios y el Estado Islámico (IS) lo saben, tres cantones en Rojava declararon su autonomía democrática a principios de este año, bajo el liderazgo del Partido de la Unión Democrática (PYD). Kobane es uno de estos cantones y el PYD tiene relaciones muy estrechas con el PKK.

El significado de esta declaración fue que, aunque el PKK tenía previamente alguna influencia en otras partes del Kurdistán, aparte de la región Kurda de Turquía, por primera vez, un muy cercano aliado del PKK, el PYD reclamó su autogobierno en otra parte, es decir, en el Kurdistán Sirio. Como todos hemos observado desde entonces, en los ojos del gobierno Turco se trata de una ganancia inaceptable de los Kurdos. ¿Por qué? Porque si la autonomía Kurda en el norte de Siria podría consolidarse, toda la estrategia de "paz" del gobierno turco y el Estado (en su mayoría no es lo mismo), que consiste en el reconocimiento de sólo los derechos individuales de los Kurdos, sería dañada. No se puede negar los derechos nacionales de un pueblo que emerge como una entidad colectiva, tanto dentro como fuera de sus fronteras.

Luego fuimos testigos de cómo Turquía ayudó a militantes a cruzar sus fronteras libremente y les proporcionó armas y municiones con el fin de que puedan aplastar la resistencia Kurda en Kobane. Como los defensores Kurdos privados de armas pesadas resistieron durante más de un mes, la opinión pública en Occidente comenzó a preguntarse por qué la coalición liderada por Estados Unidos contra IS no estaba ayudando a los defensores de Kobane. Debido a esta presión de la opinión pública, y a algunas otras consideraciones pragmáticas también, los Estados Unidos hicieron cambios en su política y comenzaron a proporcionar equipos militares a Kobane. Las autoridades estadounidenses también desarrollaron un diálogo con el PYD y así llegaron a reconocer que es un actor político legítimo y aliado en la lucha contra el SI.

Este había sido el punto importante de inflexión en relación con el proceso de paz en Turquía. Hasta entonces, la política de Estados Unidos hacia los Kurdos que apoyan el PKK ,fue determinada por las elecciones de Turquía, y las potencias Occidentales nunca se había puesto en contacto directamente, ya sea con el PKK o cualquiera de sus organizaciones afiliadas. El PKK todavía está en la lista de "organizaciones terroristas" de EE.UU y la Unión Europea (UE). Así que la colaboración de Estados Unidos con el PYD en la lucha contra IS no significa que el PKK ha sido finalmente reconocido por Occidente. Sin embargo, poniéndose en contacto directamente con el PYD, Occidente construye una relación indirecta también con el PKK.

Algunos pueden encontrar extraño lo que se dice más arriba y considerar lo anterior, incluso como una postura pro-estadounidense. Pero no; hemos aprendido de la historia reciente, que el reconocimiento por parte de las potencias internacionales de los movimientos de liberación, como actores legítimos, ha sido muy importante para la solución de problemas tales como la cuestión Kurda. De lo contrario, los Estados nacionales podrían retrasar fácilmente soluciones democráticas decentes, sin dejar de oprimir a las minorías.

Justo antes de este cambio por parte de los Estados Unidos, cuando Kobane estaba a punto de caer en manos de IS, el PKK llamó a los Kurdos de Turquía a tomar las calles y protestar contra la política del gobierno Turco, que de forma encubierta, apoyaba a IS y no pretendía ayudar a Kobane en modo alguno. Manifestaciones masivas en las ciudades y pueblos Kurdos de Turquía tuvieron lugar y jóvenes Kurdos, pro-PKK, incendiaron edificios oficiales, escuelas, algunas sucursales bancarias y tiendas. La clase media Kurda también participó en las manifestaciones, evento raro en el Kurdistán de Turquía. En última instancia el Estado Turco tuvo que declarar el toque de queda durante un par de días y más de 40 personas, en su mayoría manifestantes, fueron asesinados a tiros, en la mayoría de los casos por las fuerzas de seguridad. Este fue un levantamiento real, aunque mal organizado por el movimiento Kurdo.

Me parece que podemos señalar la importancia real de este levantamiento por los siguientes puntos: en primer lugar, la ruptura entre los Kurdos y los Turcos se profundizó, cuando la mayoría de la población Turca cree en la propaganda gubernamental, que mantiene que los que protestaron estaban dispuestos a sabotear el "proceso de paz". Primera vez que escuchaba a un amigo decir que "no me importa un carajo lo que la gente en Occidente [es decir, los turcos] piense acerca de ello!" En segundo lugar, se demostró que el Estado Turco no podía controlar el llamado "orden público" en la región Kurda.

Así que para resumir donde estamos ahora en el "proceso de paz", podemos afirmar que:

El lado Kurdo está ahora en una posición más cómoda, ya que el Proceso de Paz se ha convertido en una parte integral de los acontecimientos cruciales en Oriente Medio. Parece difícil, de ahora en adelante, confinar la cuestión Kurda en Turquía dentro de las fronteras de la nación.

Sin embargo, la creciente brecha entre los sentimientos de los Turcos y los Kurdos no son buenas noticias, ya que si esto continúa es muy probablemente que, cualquier solución pacífica a la cuestión kurda, sea imposible en el futuro. Y los acontecimientos recientes muestran que estamos marchando en esa dirección: Después de las manifestaciones masivas por Kobane, cientos de Kurdos han sido detenidos y encarcelados en toda Turquía.

A pesar de todo esto, el gobierno evita recurrir a medidas represivas severas, tales como las operaciones militares y policiales a gran escala, que eran familiares durante los años 90. ¿Cuál es la razón de este enfoque inusual? Bueno, las elecciones generales se celebrarán en mayo del 2015 y la estrategia del partido gobernante AKP por ganar las elecciones, es presentarse como el único defensor del "Proceso de Paz y de Fraternidad" aun cuando el movimiento Kurdo intenta "sabotear" el mismo. Lo extraño de esta estrategia es que, básicamente, el AKP busca el apoyo de la población Turca, pero no de los Kurdos. El AKP y el Presidente Erdogan entienden el "Proceso de Paz" como un mero "acabar con el terrorismo" y "desarmar al PKK", sin hacer ningún tipo de compromiso sustancial. Por otro lado, una reciente encuesta pública sobre las próximas elecciones sugiere que algunos segmentos de la población Kurda, que previamente votaron por el AKP, preferirán al HDP en este momento. Esto es principalmente debido a los intentos del gobierno para socavar la autonomía Kurda en Rojava.

El defecto fundamental: la falta de un movimiento por la paz

Además de todos estos logros políticos reales, cambios en las políticas y la internacionalización de la cuestión Kurda, es el apoyo activo de la sociedad en su conjunto lo que traería una paz permanente en Turquía. El movimiento Kurdo puede movilizar a la población Kurda en una escala masiva sólo en tiempos de crisis real. Cientos de miles de Kurdos se manifestaron sólo cuando Kobane estaba a punto de caer y cuando el presidente Erdogan abiertamente lo aprobó con una sonrisa pícara en su rostro durante un discurso público.

Si miramos a la sociedad Turca, la situación es mucho peor. La gente progresista que defiende la paz no ha sido capaz de construir un movimiento por la paz inclusivo desde el comienzo del "Proceso de Paz". Parece que se han contentado con la observación y el "análisis" de los retrocesos y avances del Proceso.

Y el apoyo de la mayoría de los ciudadanos de a pie para el Proceso de Paz se desvanece frente a una propaganda cada vez más nacionalista y chovinista por parte del gobierno y sus medios de comunicación.

Por último, también podemos hablar de un acontecimiento ominoso que se da en los últimos meses. Al enfrentarse con manifestaciones masivas y algunas acciones violentas por parte de grupos de jóvenes pro-PKK, el gobierno entra en una colaboración más estrecha con los militares. En consecuencia, los militares ganan terreno en la política en detrimento de los actores políticos civiles. Este ha sido siempre el mismo patrón en Turquía. Ya que los militares nunca han estado bajo el control democrático de los gobiernos civiles, la postergación de soluciones reales y democráticas a los problemas cruciales y la creciente preocupación de las élites gobernantes sobre el "desorden público" siempre se ha traducido en el aumento de poder para los militares en el área política. Aquellos que están familiarizados con la Historia Turca moderna seguramente pueden prever hacia donde nos llevará el peso creciente de los militares.


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