• Telesur Señal en Vivo
  • Telesur Solo Audio
  • facebook
  • twitter
En medio de la búsqueda de adhesiones y apoyos políticos, la población se encuentra polarizada dada la vinculación de aspectos religiosos en el debate propiciado por el Partido Restauración Nacional.

En medio de la búsqueda de adhesiones y apoyos políticos, la población se encuentra polarizada dada la vinculación de aspectos religiosos en el debate propiciado por el Partido Restauración Nacional.

Publicado 1 abril 2018



Blogs


Las encuestas del Centro de Investigación y Estudios (CIEP) arrojan como principal resultado que el electorado costarricense quiere un “cambio” y que la mayoría no tiene claridad hacia la dirección en la que deba ser dirigido el cambio.

Nos encontramos a unas horas de la segunda ronda electoral en Costa Rica, en la que será elegido el próximo mandatario para el período 2018-2022. Tal y como sucedió durante la primera ronda, son pocas las certezas. Las encuestas demuestran un empate técnico entre los candidatos, sumado a la consistencia de un abstencionismo creciente en la población. Asimismo, la decisión entre el continuismo del Partido Acción Ciudadana (PAC) y el fundamentalismo religioso del Partido Restauración Nacional (PRN) transformó la segunda ronda en un referéndum moral, provocando conatos de violencia contra las personas más vulnerabilizadas en la contienda electoral (mujeres y personas LGTBI). Desde 2007, producto de la coyuntura del Referéndum sobre el TLC,  la polarización no había sido una característica de la población costarricense: hoy se constituye en la única certeza del panorama electoral.

La primera ronda, del pasado 4 de febrero, resultó con un claro vencedor. Fabricio Alvarado, del Partido Restauración Nacional (PRN), obtuvo el apoyo del 24,91 % del electorado. Al estar muy lejos del 40 % mínimo para llegar al Ejecutivo, la contienda  electoral se extendería a una segunda ronda, en la que Fabricio enfrentaría al candidato oficialista, Carlos Alvarado, del Partido Acción Ciudadana (PAC), quien obtuvo el 21,66 % de los votos[1]. Tal como en otros países de la región, los resultados electorales indican la existencia de una fuerte apatía hacia los partidos tradicionales[2]. Sin embargo, esta condición pareciera ser extensiva solamente a la dirección del Ejecutivo, pues la conformación de fuerzas de la Asamblea Legislativa sigue encabezada por el Partido Liberación Nacional (PLN).

¿Fin del bipartidismo en Costa Rica?

Las bancadas parlamentarias cuentan con una abrumadora mayoría en la derecha neoliberal. De 57 diputaciones, la primera fuerza política la ostenta el Partido Liberación Nacional (PLN) con diecisiete escaños, seguida de catorce ocupados por Restauración Nacional[3], diez por Acción Ciudadana y nueve para el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), mientras que Integración Nacional (PIN) y el Republicano Social Cristiana (PRSC) cuentan con dos y cuatro representantes respectivamente. La izquierda regresaría a una escaza representación: la única diputación sería ocupada por el ex candidato presidencial de la contienda del 2014, José María Villalta del Frente Amplio (FA). De esta forma, en el “primer poder de la República” se consolidan los fundamentalismos económicos -clásicos del bipartidismo- además del fortalecimiento del fundamentalismo religioso.

Por otro lado, los meses siguientes se caracterizaron por distintas negociaciones y encuentros entre los candidatos presidenciales y las élites político-económicas del país. Las agendas políticas fueron marcadas por adhesiones para ambos partidos, donde resuenan actores políticos del pasado y altamente vinculados con el bipartidismo. Entre ellos, Fabricio Alvarado rescató: 1) Álvaro Ramos: ex ministro de Seguridad durante el primer mandato de Oscar Arias, encargado de redadas en la capital josefina para “limpiarla de gays”[4]; 2) el equipo económico completo: conformado por empresarios ligados al agronegocio, así como la Academia Centroamericana, la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (UCCAEP), actores claves para las administraciones de Liberación Nacional y la Unidad Social Cristiana. Entre ellos se pueden nombrar a: Luis Mesalles, Alfredo Volio y Ronald Jiménez[5]; 3) actores del núcleo político de Liberación Nacional: Fernando Berrocal, Fabio Molina, Alfio Piva, Marco Vinicio Ruiz, Fernando Naranjo, entre otros (as), todos comparten el apoyo a la agenda económica neoliberal además de escándalos de numerosos escándalos de corrupción; 4) Antonio Álvarez Desanti: excandidato de Liberación Nacional y; 5) Otto Guevara: excandidato del Movimiento Liberatario, político de la extrema derecha. Con estas adhesiones, todo parece indicar que Fabricio Alvarado no sólo se aleja, cada vez más, de su eslogan de campaña “con las manos limpias” sino que él también se adhiere al continuismo neoliberal del bipartidismo.

Por el otro lado, el PAC tampoco dejó de tocar las puertas del bipartidismo. La primera gran adhesión fue realizada por el excandidato presidencial, Rodolfo Piza; con quien acordó: 1) modificaciones sensibles de los Programas de Afectividad y Educación Sexual[6]; 2) el no apoyo al matrimonio igualitario –contradiciendo a la Corte IDH-; 3) la oposición a aumentos salariales y a la renegociación de convenciones colectivas, entre otros. Posteriormente, Carlos Alvarado presentó como ministro de coordinación con el sector privado a André Garnier. Garnier se encuentra vinculado a empresarios ligados al conflicto por el recurso hídrico en Guanacaste, además de ser un impulsor del “Sí al TLC” y, por tanto, de la campaña del miedo[7]. Además, su equipo económico está conformado por propulsores del TLC, encabezado por Edna Camacho quién también preside la Academia Centroamericana. Así, todo parece indicar que no hay opción alternativa al neoliberalismo para el próximo 1° de abril;  además de que surgen dudas sobre la verdadera sepultura y/o superación del bipartidismo en Costa Rica.

Incertidumbre: empate técnico en la intención de voto

Las encuestas del Centro de Investigación y Estudios (CIEP) arrojan como principal resultado que el electorado costarricense quiere un “cambio” y que la mayoría no tiene claridad hacia la dirección en la que deba ser dirigido el cambio. Ante ello, el panorama se le complejiza al PAC pues ya no representa algo nuevo, como sí lo hace el candidato Fabricio Alvarado. La última encuesta del CIEP, publicada el pasado 23 de marzo, demuestra un empate técnico entre ambos candidatos con un margen de error del 2.8 puntos porcentuales, al indicar que el 43 % de la población encuestada votaría por Fabricio Alvarado, frente a un 42 % que elegiría a Carlos Alvarado[8].

 

Tabla 1: Intención de voto según CIEP.

Intención de voto

Porcentaje (19-21 de marzo)
 

F. Alvarado (PRN)   43%

C. Alvarado (PAC)   42%

Indecisas (os)         15%

Fuente: Encuesta de Opinión Pública CIEP, marzo 2018.

Violencia y polarización política

La incertidumbre se mantiene. En medio de la búsqueda de adhesiones y apoyos políticos, la población se encuentra polarizada dada la vinculación de aspectos religiosos en el debate propiciado por el Partido Restauración Nacional. A pesar de que según el CIEP (2018), las principales problemáticas identificadas por el electorado refieren a la seguridad y delincuencia (21 %) y el desempleo (15 %), el debate se ha dirigido a temáticas como el matrimonio igualitario, la promulgación de un Estado Laico, la educación sexual y el aborto. Como consecuencia, se identifican situaciones de violencia: el Frente por los Derechos Igualitarios (FDI) denunció el aumento de agresión contra personas LGTBI y cuantifica al menos 32 casos de violencia originados por odio y discriminación[9]. Además, la organización Mujeres en Acción denunció el asesinato de siete mujeres en el mes de marzo[10]. Esta ocurrencia de femicidios no había sido observada desde 2007, por lo que esa organización relaciona los conatos de violencia al ambiente de impunidad, violencia y odio proporcionado por la campaña electoral y, principalmente, por las declaraciones políticas de Fabricio Alvarado y Restauración Nacional, quienes abiertamente responsabilizan al Instituto Nacional de Mujeres (INAMU) sobre estas muertas y por ende promueven su eliminación.

Por ello, el reclamo de distintas organizaciones políticas y movimientos sociales hace referencia a la democracia y a sus instituciones, además de constantes llamados al Tribunal Supremos de Elecciones (TSE). Esto último se debe a que distintas investigaciones de medios de comunicación, así como denuncias del electorado, demuestran el uso de la religión como proselitismo político en favor de Restauración Nacional[11], aunado a la falta del mismo partido sobre la presentación de sus recursos financieros[12] y el uso de la deuda política. Ante ello, el Tribunal se ha limitado a condenar estos actos: la falta de medidas punitivas demuestran el deterioro el sistema democrático.

Por todo esto, el camino hacia la segunda ronda electoral Costa Rica está marcado por violencia, denuncias y faltas graves a la Constitución Política. La incertidumbre y la polarización parecen ser la norma en el electorado costarricense y en el panorama político partidario las opciones son mínimas: ambos proyectos políticos son neoliberales –casi idénticos- y su fractura corresponde a la defensa mínima de Derechos Humanos y avances para las mujeres y personas LGTIB. Costa Rica se constituye así en uno de los ejemplos sobre la avanzada fundamentalista religiosa en Nuestra América.

 

[1] Ver: Informe Pos Electoral de Costa Rica, disponible en http://www.celag.org/alvarado-proximo-presidente-costa-rica/

[2] Del bipartidismo histórico: Partido Liberación Nacional (PLN) y Partido Unidad Social Cristiana (PUSC).

[3] La fuerza electoral de Restauración Nacional es contundente para el 2018, al pasar de una bancada compuesta por un diputado a una de 14 diputaciones.

[4] Irónicamente, este fue el momento en el que Oscar Arias fue reconocido como Premio Nobel de la Paz, por su papel en los Acuerdos de Paz en Centroamérica. Ver: http://cambronero.cr/2018/02/alvaro-ramos-limpiar-san-jose-gays-la-campana-fabricio/

[5] Para más información, ver: http://www.vocesnuestras.org/2018-03-08/articulo/analisis-fabricio-alvarado-nuevo-dream-team-economico

[6] Para más información, ver: https://www.nacion.com/el-pais/politica/carlos-alvarado-y-rodolfo-piza-acordaron-suspender/HKNKB3BBVFF3RIUAPLLC7AP64Y/story/ y https://www.facebook.com/lanacioncr/videos/10160199959020051/

[7]Para más información, ver:  https://www.nacion.com/el-pais/politica/carlos-alvarado-nombraria-a-empresario-andre/INXRHW6JWJC6NNXJOJMXIB4UDA/story/

[8] Para más información, ver: https://ciep.ucr.ac.cr/images/INFORMESUOP/EncuestaMarzo23/Informe-encuesta-CIEP-marzo-23-1.pdf

[9] Para más información, ver: https://www.elmundo.cr/fdi-contabiliza-32-casos-violencia-orientacion-sexual-despues-del-4-febrero/

[10] Para más información, ver: https://www.facebook.com/notes/mujeres-en-acci%C3%B3n-costa-rica/mujeres-en-acci%C3%B3n-costa-rica-exige-un-alto-al-femicidio/186390391972132/

[11] Para más información, ver: https://radioemisorasucr.atavist.com/en-secreto-fabricio-alvarado-pidi-a-pastores-ayuda-para-su-campaa

[12] Para más información, ver: https://semanariouniversidad.com/pais/restauracion-reporta-al-tse-pagos-a-fabricio-y-sus-vicepresidentes-por-alquilar-carros-a-la-campana/


teleSUR no se hace responsable de las opiniones emitidas en esta sección

Comentarios
0
Comentarios
Nota sin comentarios.