Los Nativos-Hawaianos son la última población indígena en los EE.UU sin su propio gobierno. Pero lo que quieren es independencia, no reconocimiento legal.
A principios de noviembre, un período de votación de un mes comenzó para un grupo de Hawaianos para elegir a los delegados a la convención constitucional. Al Jazeera anunciaba el proceso, llamado Na'i Aupuni como "una elección histórica [que] tiene por objeto devolver la soberanía a los nativos de Hawai, un pueblo que todavía siente la amarga ruina de la colonización".“Colorlines” replicó la historia diciendo, "los nativos de Hawai está votando para crear un Gobierno Independiente". Para aquellos interesados en la libre determinación de los pueblos indígenas, en particular de los Hawaianos, que son la última población nativa remanente en los EE.UU sin sus propias estructuras de gobierno, la historia suena como una buena noticia.
Sin embargo, para Anne Keala Kelly, cineasta galardonada, Nativa-Hawaiana y periodista, "esto no es una votación, sino un asalto a mano armada".
Kelly está íntimamente involucrada en el movimiento en contra de la construcción de un nuevo telescopio de 30 metros en la cumbre sagrada de la montaña Mauna Kea. Está haciendo un documental sobre el tema, llamado "¿Por qué la montaña?"
"Es como si el gobierno estatal y federal se reunieron y decidieronponernos una pistola en la cabeza y nos dicen, van a votar por una de estas dos cosas:"Me quieren, ome aman", me dijo Kelly en una entrevista para “Uprising”.
Doscientos Nativos-Hawaianos están compitiendo por la oportunidad de ser uno de los 40 delegados parala convención a principios del próximo año que determinará la relación entre el Gobierno estadounidense y los Nativos-Hawaianos. Sin embargo, muchos Hawaianos, como Kelly, están expresando serias dudas sobre el proceso. Walter Ritte, uno de los candidatos y activista Hawaiano desde hace mucho tiempo, recientemente retiró su nombre de la elección.
"Si usted va a sembrar una semilla que no seapono, entonces usted va a cosechar algo que no seapono", dijo, usando la palabra hawaiana para "justa" o "imparcial". Ritte también ha llamado la elección "un falso camino a la nacionalidad y su engañosa visión desoberanía".
El meollo de la cuestión es la anexión de Hawai a los EE.UU que puede no ser legal. En uno de los informes de noticias más matizados que cubren las elecciones, la BBC expuso que la anexión de las Islas se hizo por mandato del Congreso después que los EE.UU comenzó su ocupación, y por lo tanto es posiblemente inválida bajo la ley internacional. Por otra parte, en 1993 el presidente Bill Clinton firmó una "resolución de disculpa", expresando su pesar por el derrocamiento de la monarquía Hawaiana por parte de los EE.UU.
Kelly explicó que las semillas de Na'i Aupuni comenzaron cuando la Oficina de Asuntos de Hawai, escribió al Departamento de Estado exigiendo la base legal para la anexión de Hawai. Kelly dijo: "Después de 3 semanas de la carta, de la nada, el Departamento de Interior anunció audiencias en Hawai para discutir la creación de una entidad de Gobierno Nativo. Al cabo de seis semanas, el Departamento del Interior estaba en Hawai celebrando audiencias en cada isla"
La mayoría de los cientos de Hawaianos que testificaron en las audiencias desafiaron la legitimidad del Gobierno de Estados Unidos en Hawai y exigieron la independencia. "No les necesitamos aquí. Este es nuestro país", y "¡Fuera de nuestra casa! Vayan a su casa", fueron algunos de los sentimientos expresados.
Después de estas audiencias, la Administración Obama adoptó elNa'i Aupuni, el proceso electoral actual, que dado el contexto histórico aparece como un intento de legalizar retroactivamente la anexión a través de una fachada de participación Nativa Hawaiana.
"Ellos han estado tratando de encubrir el derrocamiento [del reino de Hawai] durante 200 años", dijo Kelly.
Aparte de los orígenes problemáticos de esta elección, hay serias dudas sobre quién tiene en realidad el derecho a emitir su voto. Según Kelly, el Gobierno del Estado de Hawai gastó millones de dólares a lo largo de varios años tratando que los Nativos-Hawaianos registren sus nombres. Sólo alrededor de 19 milHawaianos, demedio millón de residentes y de la diáspora, lo hicieron. El Estado entonces improvisó otras listas de personas que han solicitado becas y préstamos para la vivienda y amplió el registro a aproximadamente 150 mil. Después de darse cuenta de que miles de nombres eran de personas que han fallecido, la lista se redujo aproximadamente a 95 mil. Este registro defectuoso es la lista de votantes que se elaboró para esta elección.
Durante décadas, el movimiento por la soberanía Nativa-Hawaiana ha exigido el derecho a la libre determinación. En los últimos años el movimiento ha crecido, su fuerza ha sido especialmente visible durante el último año de protestas contra el telescopio Mauna Kea. Los activistas acamparon en la montaña y usaron la desobediencia civil militante, negándose a dejar que los equipos de construcción pasen por las estrechas carreteras empinadas que conducen a la cumbre que alberga un Observatorio de clase mundial internacionalmente financiado. Las acciones políticas recibieron cobertura muy extendida en los noticieros y demostraron el poder de una población organizada. "Lo que quieren asegurarse es que el movimiento de soberanía Hawaiana, que ahora se ha convertido en un movimiento de independencia - no tenga ninguna tracción", explicó Kelly, en referencia a la presión del Gobierno de Estados Unidos en la elección.
La lucha por Hawai va más allá de la relación entre los nativos de Hawai y el Gobierno federal de Estados Unidos. Desde el principio, Hawai alberga una base militar estratégica, permitiendo a los EE.UU ampliar su alcance hasta el medio del Océano Pacífico. "Estados Unidos invadió ilegalmente Hawai para facilitar su guerra con España y Filipinas", dijo Kelly. "La presencia norteamericana aquí tiene todo que ver con la militarización del Pacífico".
Los EE.UU llevan a cabo los ejercicios marítimos más grandes del mundo cada dos años en las islas Hawaianas. Decenas de miles de militares de decenas de países asisten al RIMPAC, incluyendo Indonesia, que está supervisando su propia ocupación de las islas del Pacífico de Papúa Occidental. La brutal represión de Indonesia sobre el Movimiento de Independencia de Papúa Occidental se ve facilitada por la ocupación de larga data de los EE.UU de las islas del Pacífico de Hawai.
Si los Nativos-Hawaianos pueden ser acorralados en gobernar su propia "nación dentro de una nación", como han sido las tribus indígenas del continente, entonces la supremacía del estado de los EEUU sobre las tierras Hawaianas permanecerá intacta. Los Nativos-Hawaianos tendrán control sobre territorios limitados cuyas fronteras, como las reservas indígenas del continente, se determinarán con el permiso del Gobierno de los Estados Unidos. Si esta elección fuera realmente sobre la Independencia y la soberanía Hawaiana, entonces estarían votando sobre si sus islas deben seguir siendo un estado de Estados Unidos, o se convierten en nación soberana.
Esa elección democrática nunca ha sido ofrecida por el Gobierno federal y probablemente nunca lo será.
Sonali Kolhatkar es presentadora y productora ejecutiva de Uprising, un programa radial diario de KPFK Pacífica Radio. También es Directora de ‘Afghan Women Mission’, una organización no lucrativa con sede en Estados Unidos que apoya a activistas de los derechos de las mujeres en Afganistán y co-autora de Bleeding Afghanistan: Washington, Warlords, and the Propaganda of Silence".