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Durante los nueve primeros meses del año 2022, se confirmaron tres veces más muertes de niños en Burkina Faso, que lo anunciado en el mismo periodo de 2021.

Durante los nueve primeros meses del año 2022, se confirmaron tres veces más muertes de niños en Burkina Faso, que lo anunciado en el mismo periodo de 2021. | Foto: @NoticiasONU

Publicado 17 marzo 2023



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La ONU advirtió que en los nueve primeros meses del año 2022, se confirmaron tres veces más muertes de niños en Burkina Faso, que en el mismo periodo de 2021.

Un informe presentado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) confirmó que alrededor de 10 millones de niños de Burkina Faso, Malí y Níger necesitan urgentemente ayuda humanitaria debido a los conflictos armados.

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“Los conflictos armados afectan cada vez más a los niños y niñas del Sahel central, y la intensificación de los enfrentamientos militares está poniendo sus vidas y su futuro en situación de máximo riesgo”, precisó Unicef.

De igual manera alertó la Organización de Naciones Unidas que “a medida que las tácticas de los combatientes se vuelven más brutales, los niños se han convertido el blanco directo de los grupos armados no estatales que operan en una amplia franja de Malí y Burkina Faso y, cada vez con mayor frecuencia, en el Níger”.

Durante los nueve primeros meses del año 2022, se confirmaron tres veces más muertes de niños en Burkina Faso, que lo anunciado en el mismo periodo de 2021. En este sentido el ente precisó que la mayoría de los niños murieron por heridas de bala durante ataques a sus aldeas o restos explosivos de guerra.

“El año 2022 fue especialmente violento para los niños del Sahel central; casi con toda seguridad, fue el año más mortífero desde que estalló el conflicto armado en el norte de Malí hace más de una década”, puntualizó Unicef.

La realidad muestra que en la región central de Burkina Faso el número de niños que reciben tratamiento por desnutrición aguda grave en comunidades con alta cifra de personas desplazadas aumentó un 50 por ciento en 2022  con relación al año 2021.

Al declarar que en 2022 se registraron 172 incidentes violentos, incluidos ataques de grupos armados en las zonas fronterizas del norte de Benin, Côte d’Ivoire, Ghana y Togo, la Unicef precisó además que en el caso de Burkina Faso más de 20.000 burkineses han sido desplazados a la fuerza, entre los cuales más de la mitad, niños y niñas cruzaron las fronteras en 2022.  

Por otro lado la crisis climática ha impactado profundamente en el Sahel, con visibles afectaciones por la sequía y la falta de agua purificada. “Las temperaturas aumentan 1,5 veces más rápido que la media mundial”, declaró Unicef.


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