Alegando falta de pruebas, el Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF) absolvió al expresidente del Senado Renan Calheiros, antiguo aliado del presidente de facto Michel Temer y acusado del desvío de dinero público.
La decisión de esta causa introducida en la Fiscalía en 2017 fue tomada por unanimidad por los cuatro jueces que participaron en la audiencia: Edson Fachin, Celso de Mello, Gilmar Mendes y Ricardo Lewandowski
"La Fiscalía, en este caso, no probó el efectivo desvío de recursos", dijo Fachin. Argumentó que un caso penal los "indicios" deben ser transformados en pruebas, algo que no se concretó.
La decisión de Fachin en este caso contrasta con las tomadas en el caso del expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y que lo dejaron fuera de las elecciones presidenciales de octubre, pese a que la defensa del líder del Partido de los Trabajadores (PT) denuncia que no hay pruebas suficientes para condenarlo.
Asimismo, este juez decidió ignorar la petición de las Naciones Unidas (ONU) de respetar los derechos políticos de Lula hasta tanto no termine el proceso judicial en su contra.
Tras conocer su absolución, Calheiros afirmó a través de Twitter sentir que se ha quitado un peso de encima.
Esse julgamento encerrou um momento muito difícil de perseguição e acusações sem provas do ministério público federal contra mim. Foram longos 11 anos de injustiças.
— Renan Calheiros (@renancalheiros) 18 de septiembre de 2018
Foram 200 dias de crise, tendo esse assunto como principal notícia nos veículos de comunicação. https://t.co/hPDiIXyw3w
“Debido a esta acción, me hicieron un acusado, me quitaron la presidencial del Senado y me quitaron la línea de sucesión de la Presidencia de la República”, afirmó.
Además, calificó la acusación en su contra como “una masacre” en su vida, con “200 días de crisis”.
Um massacre na minha vida e na minha família que chega ao fim.
— Renan Calheiros (@renancalheiros) 18 de septiembre de 2018
Por causa dessa ação, tornaram-me réu, quase fui afastado da presidência do Senado e fui retirado da linha sucessória da Presidência da República.
El escándalo de corrupción en contra de Calheiros lo llevó a dimitir de la Presidencia del Senado, que ocupaba en 2007, sin embargo, fue reelegido en 2013 y ocupó el cargo hasta el 1 de febrero de 2017.