La Corte Suprema de Justicia del Perú confirmó condenas de hasta 17 años de cárcel contra seis militares peruanos por el homicidio de 12 campesinos y la desaparición de otros cuatro en 1990.
El tribunal supremo confirmó las sentencias por los delitos de lesiones seguidas de muerte, homicidio calificado y desaparición forzada, considerados crímenes de lesa humanidad por el derecho penal internacional.
Suprema confirma condena contra militares por muerte y desaparición de 16 campesinos.▶https://t.co/EfEt2py7L3 pic.twitter.com/WaZ8ETRgCV
— Poder Judicial Perú (@Poder_Judicial_) 10 de junio de 2018
Fue en la región surandina de Apurímac, cuando en 1990, las víctimas -quienes vivían en pueblos aledaños- fueron detenidos por los uniformados bajo la falsa presunción de "terroristas", siendo conducidos a la Base Contrasubversiva de Antabamba, último lugar en el que se los vio con vida.
"Fue una intervención militar marcadamente arbitraria y de grave violación de los derechos humanos", señaló el fallo judicial que ratificó la sentencia de:
-17 años de cárcel para Alan Olivari Medina, a cargo de los patrullajes antisubversivos en la zona en abril de 1990.
-15 años de cárcel para Jaime Pando Navarrete, jefe de Base Contrasubversiva de Antabamba.
- Diez años de cárcel para Mario Cruz Porcela, Beltrán Tapia Carrasco y José Pérez Quispe.
- Ocho años de cárcel para Felipe Montañez Ccama.
Asimismo, la Corte ordenó incrementar una reparación civil de 100.00 soles (alrededor de 30.700 dólares), que los condenados deben pagar a los familiares de las víctimas.
Los sentenciados deberán volver a ser juzgados por el delito de violación sexual y torturas contra las campesinas Aurelia Huamaní e Isabel Leoccalla, luego que el tribunal los absolviera.
Los campesinos secuestrados, torturados y desaparecidos fueron:
-Quintín Alférez Cjuro.
-Telésforo Alférez Achinquipa.
-Gregorio Huisa Alcahuamán.
-Dámaso Charccahuana Huisa.