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Este viernes se suma el gremio de profesores, quienes han desafiado la asonada militar y el estado de excepción.
El golpe militar de inicios de semana en Myanmar ha generado protestas en el país asiático, las cuales continúan esta jornada de viernes cuando los profesores locales se han unido a una campaña de desobediencia civil contra el pronunciamiento castrense.
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Como parte de la protesta contra la toma del poder por parte de los militares, algunos profesores se negaron a trabajar o cooperar con las autoridades en una campaña de desobediencia civil, la cual comenzó entre los trabajadores médicos poco después del golpe del lunes, aunque desde entonces se ha extendido hasta incluir a estudiantes, grupos de jóvenes y algunos trabajadores tanto del sector estatal como del privado.
Los profesores se reunieron frente a los edificios del campus de la Universidad de Educación de Rangún, la antigua capital birmana, con cintas rojas y carteles de protesta, y se escuchaba que: "no queremos este golpe militar que ilegalmente tomó el poder" y "ya no vamos a trabajar con ellos. Queremos que el golpe militar fracase".
Una protesta similar se produjo en la Universidad de Dagon en la propia ciudad, capital del país hasta 2005.
La oposición entre grupos profesionales como médicos y maestros se produce cuando hubo otras protestas menos organizadas, incluidas las personas que golpean latas y cacerolas y hacen sonar las bocinas de los autos para señalar su oposición al golpe.
#China además, junto a Rusia, bloqueo una resolución en Consejo de Seguridad de #ONU para imponer sanciones a Myanmar y rechazó la filtración de un documento interno que está debatiéndose en ese ente https://t.co/GjsHTE2ia7
— Iramsy Peraza (@IramsyteleSUR) February 3, 2021
Otros manifestantes antigolpistas también marcharon el viernes en la ciudad de Dawei, en el sureste del país, seguidos por simpatizantes en motocicletas, mostraron imágenes de video.
El ejército gobernó de modo directo el país del sudeste asiático, también conocido, aunque no oficialmente, como Birmania, durante casi 50 años después del golpe de 1962 y aplastó varias veces las protestas a favor de la democracia a lo largo de los años. El lunes último, los militares regresaron al poder con un golpe incruento que impidió la formación de un Gobierno emergido de las elecciones de noviembre pasado.
