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La Cancillería rechazó este martes las acusaciones antiraníes de Arabia Saudita y Bahrein, en sintonía con EE.UU.
El portavoz de la cancillería iraní Seyed Abás Musavi rechazó este martes las declaraciones hechas por Arabia Saudita y Bahrein, en las cuales instaban al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a extender el embargo de armas convencionales contra el país islámico más allá del 18 de octubre próximo, cuando debe expirar en virtud de acuerdos previos.
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Las declaraciones de Musavi llegan en respuesta a un documento de Riad y Manama hecho público el lunes. Ambos alegaron que las sanciones contra Teherán serían una herramienta importante para contrarrestar los esfuerzos de ese país para "proporcionar armas a sus grupos afiliados en la región".
El embargo de armas del Consejo de Seguridad de la ONU contra Irán se impuso para prohibir la venta y la exportación de armas al país.
Sin embargo, tras el acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Teherán y el Grupo 5+1, se decidió que tales medidas restrictivas finalizarán en octubre de 2020.
Irán se ha defendido, además, de las acusaciones de Arabia Saudita y Bahrein bajo el argumento que "es una ironía amarga que los países que han matado a miles de personas, incluidos mujeres y niños yemeníes, con armas estadounidenses", muestren apoyo a la exigencia de EE.UU. de continuar el embargo.
La actual controversia se produce luego que se supiera que EE.UU. busca extender la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad, pero Irán enfatiza que Washington ya no es integrante del acuerdo nuclear ni tiene derecho a nada en virtud de tal resolución, que refrendó el pacto.
Por su parte, Rusia y China, miembros permanentes del Consejo de Seguridad han rechazado extender el embargo de armas contra la nación persa.
