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El Salvador también ha solicitado a EE.UU. la extradición del coronel Mario Reyes Mena, otro sospechoso en el caso que se cree es el principal responsable de los asesinatos.
El coronel Francisco Antonio Morán, exdirector de la Policía de Hacienda, y el general Guillermo García, exministro de Defensa, fueron arrestados por estar implicados en los asesinatos de cuatro periodistas holandeses en el año de 1982, cuando cubrían la guerra civil salvadoreña.
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La información ha sido notificada a la prensa por la Asociación por los Derechos Humanos (ASDEHU), misma institución que acompañó a las víctimas dolientes, en el proceso que pretende deducir responsabilidades sobre los titulares de la fuerza armada.
Ambos exmilitares fueron capturados por el caso judicial donde se investigan las muertes de los comunicadores Jan Kuipier, Hans Lodewijk ter Laag, Koos Andries Koster y Johannes Jan Willemsen, ocurridas el 17 de marzo de 1982, en Santa Rita, Chalatenango.
#ElSalvador Hoy se conoció la captura del coronel Francisco Antonio Morán, exdirector de la extinta Policía de Hacienda y el general Guillermo García, exministro de Defensa.
— Roberto Hugo Preza (@HugoPreza_) October 15, 2022
Ambos ex militares son acusados de la muerte de periodistas holandeses durante la guerra.@teleSURtv
El Salvador también ha solicitado a Estados Unidos la extradición del coronel Mario Reyes Mena, otro sospechoso en el caso que se cree es el principal responsable de los asesinatos.
Mientras el general García y el coronel Morán, serán procesados el lunes ante un juez de Chalatenango.
Una Comisión de Investigación de la Organización de las Naciones Unidas de 1993 marcó al coronel Reyes Mena como "responsable de planificar la emboscada y el asesinato" de los comunicadores.
Ese mismo año se aprobó una ley de amnistía en El Salvador, lo que significó que Reyes Mena no podría ser procesado en ese país.
La investigación penal sobre los asesinatos de los cuatro periodistas holandeses se inició en 2013 y la ley de amnistía de El Salvador se levantó en 2016. El resultado fue que los perpetradores de crímenes durante la guerra civil salvadoreña ahora pueden ser procesados.
