Boletines
Opacidad
Opacidad
Señal en Vivo
Solo Audio
El presidente de EE.UU. sostiene que los gobiernos centroamericanos no están haciendo nada para detener las caravanas de migrantes que enfilan hacia su país.
La ayuda financiera que el Gobierno del presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, suspendió al Triángulo Norte de Centroamérica (conformado por Guatemala, El Salvador y Honduras) asciende a unos 566 millones de dólares (mdd).
LEA TAMBIÉN:
La asistencia financiera cortada estaba destinada a programas que tienen como propósito mejorar la seguridad interna y el estilo de vida de la población con el objetivo de reducir la migración a Estados Unidos, de acuerdo con el Plan de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo del Norte (PAPTN).
Este plan surgió a raíz de la crisis generada por una masiva migración de menores de edad provenientes de centroamérica ocurrida en 2014.
En 2016, el Congreso de EE.UU. aprobó a Guatemala 260 millones de dólares durante los años fiscales de 2017 y 2018 (120 y 140 mdd en forma respectiva); a El Salvador le aprobó 131 millones (58 en 2017 y 73 en el año 2018) y a Honduras 175 millones (80 y 95).
Sin embargo, el presidente Trump acusó que los países del Triángulo Norte no estaban haciendo nada para detener las caravanas de migrantes, ante lo cual ordenó cortar la ayuda económica que su país destina a esas nación centroamericanas.
“Le estamos entregando 500 millones (de dólares), les pagamos una cantidad tremenda de dinero y no les vamos a pagar más porque no están haciendo nada por nosotros”, advirtió Trump el año pasado.
El viernes se conoció que el Departamento de Estado comunicó al Congreso la decisión de terminar con los programas de ayuda exterior para el Triángulo Norte correspondiente a los ejercicios fiscales de 2017 y 2018.
Los gobiernos de Guatemala, El Salvador y Honduras han informado que hasta ahora no han sido notificados de manera oficial sobre la determinación de Trump de suspender la asistencia financiera.
Los gobiernos de Washington han tenido una influencia “muy fuerte” en los países de Centroamérica a lo largo de la historia, según reconoció Cynthia Arnson, directora del Programa sobre Latinoamérica del Wilson Center, con sede en Washington, en una entrevista para BBC.
Arnson puso como un ejemplo que durante la guerra interna en El Salvador (1980-1992), EE.UU. destinó unos seis mil millones de dólares en ayudas al Gobierno y a las Fuerzas Armadas para combatir al guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
En Nicaragua, el gobierno de Washington financió a la Contra que buscó sin éxito derrocar al régimen revolucionario del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
En Guatemala, también Estados Unidos dotó de dinero a las autoridades tanto civiles como militares para combatir a la insurgente Unidad Nacional Revolucionaria Guatemalteca (URNG).
