La decisión del fiscal general de EE.UU. sienta un nuevo precedente en cuanto a las restricciones y medidas que ha venido aplicando e impulsando el Gobierno de Donald Trump contra los migrantes.
El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, determinó este lunes que los familiares de una víctima de violencia no pueden optar a la solicitud de asilo como un "grupo social particular", imponiendo con este fallo un nuevo obstáculo al sistema de asilo.
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El dictamen del funcionario de justicia estadounidense está vinculada a la decisión de la Junta de Apelaciones de Inmigración a favor de un ciudadano mexicano que solicitó asilo después de que su padre recibiera amenazas de parte de un cartel del narcotráfico.
#NEW: Attorney General William Barr overruled an asylum decision, that found a migrant whose immediate family member was persecuted in their home country may be able to claim asylum in the U.S. ���� pic.twitter.com/Fe3qsRZ75D
— Elma Aksalic (@ElmaAksalic) July 29, 2019
De acuerdo a las leyes de EE.UU. las personas pueden solicitar asilo si pueden comprobar que tienen un temor fundamentado de ser perseguidos en sus países de origen debido a su raza, religión, nacionalidad, opinión política o porque son parte de un grupo social específico.
Para Barr, la Junta "reconoció indebidamente a la familia inmediata del padre del demandado como un 'grupo social particular' por lo cual el solicitante no es apto para ser favorecido con la medida migratoria.
La decisión del Fiscal sienta un nuevo precedente en cuanto a las restricciones y medidas que ha venido aplicando e impulsando el Gobierno de Donald Trump contra los migrantes.
El presidente estadounidense ha tomado varias medidas para limitar las concesiones de asilo, incluyendo dificultarles a las víctimas de violencia doméstica el obtener protección, así como poner fin al derecho a fianza para los solicitantes de asilo, una medida que fue revocada recientemente en una corte federal.
El pasado 24 de julio un juez federal en California bloqueó temporalmente las restricciones al asilo aprobadas una semana antes por Donald Trump, que buscaban dejar fuera del sistema a la mayoría de solicitantes centroamericanos.