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La encuesta, iniciada en junio pasado, manifiesta el rechazo de la mayoría de los brasileños a las medidas contra el ambiente y la selva amazónica del país.
El Instituto de pesquisas de Brasil, Datafolha, reveló este viernes que el 86 por ciento de los brasileños rechaza la apertura de tierras indígenas a la explotación minera, una política promovida por el presidente Jair Bolsonaro.
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La encuesta, iniciada en junio pasado, manifiesta el rechazo de la mayoría de los brasileños a las medidas contra el ambiente y la selva amazónica del país.
Bolsonaro considera que los territorios indígenas deben integrarse a “las maravillas de la vida moderna”, en detrimento del respeto a sus costumbres.
El 86% de los brasileños rechaza la apertura de tierras indígenas a la explotación minera. Encuesta publicada hoy y realizada a comienzo de junio por Datafolha. La negación de Bolsonaro en relación a los datos sobre deforestación la explico en esta nota:https://t.co/mfw3A15gUa
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) August 2, 2019
“Hay una gran ofensiva de sectores que lucran mucho con la ocupación de la Amazonía y el presidente de la República ya demostraba antes de su elección una total ignorancia sobre el tema”, dijo el ex viceministro de Medio Ambiente en 2007-2008, Joao-Paulo Capobianco.
El mandatario afirmó recientemente que su objetivo es explotar las reservas minerales de áreas protegidas del Amazonas.
La publicación de estos resultados se realiza tras la destitución del director del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), Ricardo Galvão, luego de que revelara el alto nivel de deforestación del Amazonas en 2019.
INPE publicó el pasado 19 de julio que la deforestación de la región del Amazonas brasileño había aumentado en un 88 por ciento, comparado con junio de 2018. Ello provocó el descontento de Bolsonaro y la reciente salida de Galvão.
