Presidente Arce destaca necesidad de la integración regional

El presidente de Bolivia, Luis Arce, destacó este martes la necesidad de una verdadera integración regional para el beneficio de los pueblos.

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En el marco del encuentro de los presidentes de América del Sur que se realizó en Brasil, el mandatario boliviano afirmó que una "ideologización de la integración y una visión subordinada al norte impidió que se consolide este esfuerzo".

"La falta de tolerancia y la imposibilidad de asumir que somos diversos y diferentes, pero que podemos integrarnos a pesar de ello para beneficio de nuestros pueblos, truncó la unión de las naciones del sur", aseveró.

El mandatario añadió que siempre ha existido intereses dentro y fuera de la región para que no se consolide un verdadero espacio de integración y de coordinación entre los países.

Por otra parte, manifestó que se encuentran en un momento crucial de la historia, con el contexto de la geopolítica mundial en los dos últimos años que ha demandado una reflexión profunda sobre el papel de la cooperación, integración y multilateralismo en sus esfuerzos por construir un mundo más justo, democrático, equitativo y seguro

"Estamos frente a un trance crítico que puede impulsar nuestros anhelos integracionistas a niveles superiores para beneficios de todos y cada uno de nuestros pueblos. Depende de nosotros", aseguró.

El jefe de Estado resaltó que han sido testigos de cambios significativos en el escenario internacional, con la tendencia a configurar un nuevo orden mundial que se basa en el equilibrio de poderes y en el principio de la no injerencia. 

"El tránsito hacia un mundo multipolar puede demorarse, pero no se va a detener. Pero la inflexión en la historia de América Latina y el Caribe, y dentro de ella en América del Sur, no ha estado exenta de grandes dificultades y retrocesos. Viejos y nuevos tipos de golpes de Estado se concretaron a nombre de la democracia y eso es algo que no puede repetirse", aclaró.

Arce recordó diversos desafíos globales actuales como la crisis climática, sanitaria, alimentaria, energética, hídrica, pobreza, desigualdad, entre otras, que no reconocen fronteras ni se limitan a un sólo país, pues requieren una respuesta colectiva y coordinada.

"El eje de estos problemas es la crisis multidimensional del sistema hegemónico del planeta y de un orden mundial que se pretende mantener sobre la base de la imposición, la dominación y no del diálogo", precisó.

Asimismo, reafirmó la relevancia de trabajar para declarar al mundo como zona de paz.