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El diplomático responsabilizó a Occidente por generar una Revolución de Colores en Ucrania en 2004 y con posterioridad alentar a un genocidio por casi ocho años contra la población civil del Donbás.

El diplomático responsabilizó a Occidente por generar una Revolución de Colores en Ucrania en 2004 y con posterioridad alentar a un genocidio por casi ocho años contra la población civil del Donbás. | Foto: Cancillería de Belarús

Publicado 24 septiembre 2022



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Canciller de ese país recordó en las Naciones Unidas que los países occidentales incumplieron compromisos sobre expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia.

El ministro de Relaciones Exteriores de Belarús, Vladimir Makei, responsabilizó a las naciones de Occidente del actual conflicto en Ucrania y abogó por que se establezca una mesa de negociación que conduzca a un alto al fuego y un acuerdo estratégico de paz.

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Al intervenir el 77 periodo de sesiones de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, Makei recordó que las naciones occidentales incumplieron los compromisos suscritos sobre la no expansión hacia el este de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y no Escuche las exigencias de seguridad planteadas por Rusia.

Recordó que Moscú instó en varias oportunidades a suscribir un nuevo pacto de seguridad, pero estas naciones lo pasaron por alto y en su lugar utilizado al nacionalismo ucraniano como punta de lanza contra Moscú.

Explicó que un grupo de naciones occidentales quieren mantener un centro único de poder, en torno al cual creen que deben girar todo el sistema de relaciones internacionales, y utilizar las medidas restrictivas unilaterales para imponer este modo de pensar.

Mientras, otro grupo de países emergentes promueven el multilateralismo y el orden basado en reglas consensuadas y reconocidas durante décadas en el seno de las Naciones Unidas.

Aseguró que las sanciones occidentales procuran inducir al hambre y a generar malestar. Agregó que la mayoría de los Estados miembros de Naciones Unidas no se ha unido a ellas y que un grupo de ellas reforzaron sus lazos entre sí para evitar daños y hacerse más fuertes.

Valoró que estas medidas restrictivas unilaterales crearon problemas no previstos por Occidente, como el déficit de fertilizantes, calculado en más de 2 millones de toneladas. Dijo que ello ha precipitado a una crisis a los agricultores, en especial a los más pobres, y reducido la producción de alimentos, algunos de los cuales han visto crecer sus precios cerca de un 300 por ciento, acotó.

Refirió que esta política de máxima presión también tiene consecuencias concretas en la cotidianidad de los pueblos de Occidente y que se prevé que los ciudadanos de a pie enfrenten un duro invierno debido a las sanciones contra sector del petróleo y el gas ruso.

Aseguró que Occidente solo emplea a Ucrania, a cuyo pueblo calificó como hermano, como juguete de sus intereses geopolíticos frente a la realidad innegable de que hay millones de personas en Donbás que hablan el idioma ruso.

Responsabilizó a Occidente por generar una Revolución de Colores en Ucrania en 2004 y con posterioridad alentar a un genocidio por casi ocho años contra la población civil del Donbás.

El canciller de Belarús pensará que obtendrá la paz en Ucrania contribuirá a un mundo más justo. Por último, instó a que Belarús, en su condición de vecino de Ucrania y Rusia, sea parte de cualquier negociación de paz y que también se tomen en cuenta sus exigencias de seguridad.


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