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Una vez que se distribuyan las bancas habrá que analizar como queda cada fuerza para dirigir el país.

Una vez que se distribuyan las bancas habrá que analizar como queda cada fuerza para dirigir el país. | Foto: El Destape

Publicado 25 octubre 2019



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En este turno electoral se renueva la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio de la Cámara de Senadores. ¿Cuál es la importancia de esta elección en términos legislativos?

El 10 de diciembre, además de asumir los nuevos representantes del Poder Ejecutivo, se renovarán 130 bancas de diputados y 24 de senadores, mientras que los legisladores de la Cámara Baja tienen mandato por cuatro años y los de la Cámara Alta de seis años en Argentina.

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Según la ley 22.847, que se sancionó en julio de 1983, se elige un diputado cada 161.000 habitantes o fracción no menor a 80.500. Además, cada distrito electoral -se contabilizan a las 23 provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires- se le suman tres diputados para que cada distrito no tenga menos de cinco legisladores. En el caso del Senado, a cada provincia le corresponden tres legisladores, dos por la mayoría y uno por la minoría.

De los 130 diputados que renuevan sus bancas, 35 corresponden a la provincia de Buenos Aires, la que tiene mayor peso electoral por la cantidad de habitantes. La sigue la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con 12 legisladores; Santa Fe con 10; Córdoba con nueve; Tucumán y Mendoza eligen cinco legisladores; el resto de las provincias renuevan cuatro, tres y dos diputados, según la población de sus distritos.

A nivel nacional, el Frente Para la Victoria, cuyos legisladores en su mayoría integran el Frente de Todos, pone en juego 38 bancas, el mismo número que Cambiemos que va con la marca Juntos por el Cambio. La fuerza Unidos por una Nueva Alternativa (UNA), que encabezó Sergio Massa en 2015, --hoy integrante del Frente de Todos-- renueva 13 bancas.

Por su parte, el bloque justicialista ocho, Red por Argentina dos; Peronismo para la Victoria cuatro; la Unión Cívica Radical siete y el resto de los bloques responden a partidos con una denominación vinculada a partidos provinciales, como el Frente de la Concordia de Misiones; el Movimiento Popular Neuquino; el Frente Cívico por Santiago, por mencionar algunos. 

Para el politólogo Sergio De Piero, no se esperan grandes modificaciones en la conformación partidaria de la Cámara de senadores, aunque sí podrían haber más cambios en la de diputados. “La baja performance que va a tener la lista de Juntos por el Cambio lo va a afectar en diputados". Sin embargo, el peronismo, en cambio, podría incrementar algunas bancas si se cumplen los pronósticos. Lo crucial se va a dar después de las elecciones cuando se reacomoden las bancas.

Si bien en Argentina no es tan común que cambien los diputados de banca como en otros países se van a producir fracturas de bancadas. La unidad de Cambiemos va a ser complicada y habrá que ver de que modo vuelven a convivir los sectores del massismo, el de Bossio con el del FPV que debería volver a ser una sola banca.

Para De Piero, el sistema de renovación parcial de las Cámaras en Argentina es importante “para que la elección legislativa no esté atada a la del Ejecutivo y un partido se quede con ambos poderes”, explicó a TeleSUR. Habrá que esperar a los resultados del escrutinio definitivo para conocer cómo será la nueva distribución de fuerzas en las dos cámaras. En el caso de diputados, las bancas se distribuyen a través del sistema D´Hont.

Por un lado se excluyen las listas que no hayan superado el piso electoral del 3 por ciento. Luego se utiliza una fórmula matemática para determinar cuantas bancas les corresponden a cada frente electoral. En el caso de Buenos Aires, para citar un ejemplo, en 2015 el FPV sacó el 34 por ciento de los votos y obtuvo 14 bancas. En el caso de Cambiemos, con el 30,83 por ciento de los votos obtuvo 12 bancas. La fuerza UNA, con el 8 por ciento de los votos se quedó con ocho cargos legislativos.

Una vez que se distribuyan las bancas habrá que analizar como queda cada fuerza. Las alianzas que se tejan serán centrales a la hora de facilitar u obstaculizar las medidas que impulse el Poder Ejecutivo.

Otro dato a tener en cuenta en esta elección es que, por primera vez, rige la ley de Paridad de Género en Ámbitos de Representación Política que se aprobó en noviembre de 2017. Desde entonces, es obligatorio intercalar en las boletas un hombre y una mujer para garantizar el reparto equitativo de los cargos. 


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