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El vicepresidente de Venezuela, Jorge Arreaza, llamó en Roma (Italia) a acelerar el ritmo en la lucha contra el hambre, porque señaló que si bien se ha avanzado en la materia, la existencia de 795 millones de personas crónicamente subalimentadas en el mundo es una cifra aún inaceptable ante los desarrollos tecnológicos.
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Ese pronunciamiento lo realizó al recibir, en nombre de la nación suramericana, el reconocimiento otorgado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés) por el progreso en la erradicación del hambre, entregado en el marco de la 39ª conferencia del organismo internacional.
Después de enviar un gran abrazo de parte del presidente Nicolás Maduro, quien no pudo asistir al evento por problemas de salud, y de recordar que gracias al Comandante Hugo Chávez, Venezuela se ha dedicado a erradicar notablemente los niveles del hambre, pobreza y desnutrición, Arreaza agradeció a los trabajadores de la FAO por su grandiosa labor científica, apegada a la verdad de las estadísticas.
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“La últimas décadas se han caracterizado en algunas naciones por guerras para controlar recursos energéticos, saqueos y conflictos por dominación y por imposiciones de modelo económico, algo devastador, que mercantiliza el alimento, el cual pasa de necesidad a mercancía, con valor de cambio especulativo para generar ganancias y no satisfacción en seres humanos. Esto debe combatirse”.
Al mismo tiempo, manifestó que para erradicar el hambre y la pobreza extrema se debe evitar que vuelvan gobiernos neoliberales y destacó la lucha constante del líder histórico de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, y la continuidad que el mandatario Nicolás Maduro le está dando a esa área, para no sumir al pueblo en pobreza extrema, desempleo y desigualdad.
De acuerdo con el vicepresidente venezolano, el Gobierno del país suramericano ha invertido 142 mil millones de dólares en la Misión Alimentación en los últimos diez años, en beneficio de más de 22 millones de venezolanos, a través de 22 mil establecimientos fijos de alimentación.
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Recordó que durante los años 2002-2003 se crearon las primeras instituciones alimentarias que constituyeron las misiones alimentarias en Barrio Adentro, por lo que se ha distribuido con equidad la riqueza de la nación, destinando el 62 por ciento de los ingresos a la inversión social, “porcentaje alto, pero aún no estamos satisfechos”, destacó.
Arreaza explicó, además, que desde el 2003, se han distribuido más de 25 millones de toneladas de alimentos de la canasta básica con orientación a las poblaciones más desposeídas.
Luego, para atender a las poblaciones de pobreza extrema, se creó en 2004 el programa especial gratuito de las casas de alimentación, atendiendo directamente a casi un millón de compatriotas afectados con la guerra económica y el sabotaje petrolero de los años 2002 y 2003. El número de beneficiarios de este programa, apuntó, se ha ido reduciendo, al igual que la pobreza extrema, la cual del 12.2 por ciento que se ubicaba en el año 2004, ha bajado al 5.4 por ciento.
En otro sentido, aseguró que “hemos visto el milagro de la alimentación escolar. En la época neoliberal más de 730 mil niños eran atendidos sólo con un vaso de leche diaria; hoy, en tiempos de revolución, más de cuatro millones de niñas y niños reciben desayuno, almuerzo y cena con alimentos de alta calidad y nutrición, en más de 22 escuelas bolivarianas.
Señaló también que la prevalencia de la subnutrición en Venezuela en 1998 era de 21 por ciento, pero antes de 2010, ésta disminuyó a 3.83 por ciento, “ubicándonos en el rango de alta seguridad alimentaria de acuerdo con la FAO”.
La casas de alimentación en Venezuela atienden a más de 435 mil venezolanos diariamente, quienes tienen acceso a alimentos de manera gratuita y satisfactoria.
De acuerdo con el vocero venezolano, la desnutrición en Venezuela ya no es un problema de salud pública desde hace varios años, como lo indican fuentes de la Organización Mundial de la Salud.
Arreaza confirmó que, actualmente, 95.4 por ciento de los ciudadanos comen tres veces al día o más, mientras que en 1990, uno de cada 5 personas no lograba satisfacer sus necesidades alimentarias elementales.
Afirmó también que entre los años 1990 y 1998 los alimentos disponibles decrecieron en 12 por ciento, con disminución de un aporte calórico de 2 mil 140 kilocalorías por personas. En “revolución ese aporte calórico aumentó 2 mil 720 kilocaloria por persona al día, nivel calificado por la FAO como suficiencia alimentaria plena”.
El vicepresidente de Venezuela expresó que el consumo de proteínas, calcio, cereales y frutas antes era un privilegio sólo de los ricos, y ahora es derecho de todas y todos.
“Durante la primera década de este milenio, los estudios científicos revelan un mercado crecimiento en la talla de los niños de 7 años, alcanzando para el 2013, un total de 3.1 cm más que 1990, es decir que un niño de esa edad actualmente crece lo mismo, y tiene igual aprovechamiento biológico de los alimentos que uno de los años 90 de la clase más alta”.
Por otro lado, “la lactancia materna, abandonada en los programas de salud pública de la Cuarta República, ha vuelto a masificarse, su práctica ha aumentado en más de 500 por ciento, aumentando así este primer acto de soberanía alimentaria, que evita la malnutrición de los infantes”.
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Explicó también que, pese a que la guerra económica ha adquirido su mayor intensidad en los últimos tres años, Venezuela seguirá luchando para combatir los niveles de pobreza extrema en América Latina y el Caribe.
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Habló también de la seguridad social de los abuelos, quienes ya suman un total de 2 millones 600 mil pensionados, así como la entrega masiva de viviendas a las personas más humildes.
“El Gobierno Bolivariano creó la Vicepresidencia de Seguridad, Soberanía Alimentaria y Abastecimiento Seguro, la cual concentra a todos los actores institucionales que garantizan el derecho a la alimentación, con la ayuda del pueblo organizado”, destacó Arreaza.
Por último, agradeció el reconocimiento entregado por la FAO a la nación suramericana, tras haber reducido notablemente las metas del milenio para disminuir el hambre y la pobreza, asegurando que “seguiremos aportando para cambiar el sistema económico impuesto a nivel global (capitalismo), por uno que genere la mayor suma de felicidad posible para toda la humanidad (socialismo)”.
La distinción fue entregada este lunes a Arreaza, quien cumple con esta actividad en nombre del presidente Nicolás Maduro, por el éxito del país en el cumplimiento de las metas previstas en el marco de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, dijo el domingo la embajadora de Venezuela ante la FAO, Gladys Urbaneja.
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CONTEXTO
La 39º conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) sobre el hambre y la agricultura se lleva a cabo en Roma hasta el próximo 13 de junio.
Representantes de 197 países, entre ellos 14 jefes de Estado y de Gobierno y unos 130 ministros, evaluarán los resultados alcanzados desde 1996 tras la Cumbre Mundial sobre la Alimentación de Roma en la que los gobiernos se comprometieron a reducir la cifra de personas subalimentadas a la mitad para 2015.
