El canciller Elías Jaua, expuso los logros del Gobierno revolucionario de Venezuela en su lucha para erradicar la pobreza y la desigualdad, durante su intervención en la 44° Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se lleva a cabo desde el martes en la capital paraguaya.
Desde 1999 hasta 2012, el índice de pobreza disminuyó de 26 a 6 por ciento. En ese sentido, Jaua destacó el proyecto socialista impulsado por el Comandante Hugo Chávez para disminuir la desigualdad entre los venezolanos.
"El crecimiento económico solo tiene sentido si contribuye a mejorar la calidad de vida de la población", dijo. Además, indicó que Venezuela se ubica como el quinto país del mundo con mayor matrícula universitaria y el segundo de la región.
Más de 551 mil millones de dólares han sido destinados a la inversión social, cifra que representa más de 65,2 por ciento de los ingresos fiscales. Ese manejo soberano de la renta petrolera, detalló, ha sido el soporte de los beneficios para el pueblo.
Asimismo, destacó algunas hazañas de la Revolución Bolivariana como la disminución de los índices de pobreza y de hambre, que le han valido el reconocimiento de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por su sigla en inglés), como país con mayores logros en esos ámbitos.
Pensionados, empleados y universitarios han sido otros de los beneficiados con la distribución equitativa de las riquezas en la nación, así como también quienes carecían de vivienda, pues en los últimos años se han construido más de 600 mil viviendas dignas en el marco de la Gran Misión Vivienda Venezuela.
Injerencia internacional
El canciller destacó que estos avances económicos y sociales alcanzados en Venezuela se han visto alterados “por los pertinentes intentos de desestabilización y violencia política y el sabotaje económico desarrollado por la oposición venezolana con el aliento de factores desde Estados Unidos (EE.UU.)”.
También señaló que “el intento permanente de las minorías oligárquicas que se niegan a reconocer las derrotas electorales y se oponen a una justa distribución del ingreso nacional pretenden permanentemente generar violencia, sabotaje económico, planes de magniocidio, alentados y financiados desde sectores de EE.UU.”.
En este sentido, señaló el canciller que las sanciones que prentende imponer EE.UU. sobre Venezuela “serían un obstáculo para continuar el avance hacia el desarrollo integral y la inclusión de nuestro pueblo, por lo cual las rechazamos y denunciamos formalmente en este foro regional”.
Por su parte, la subsecretaria de Estado de EE.UU. para el Hemisferio Occidental, Heather Higginbottom, aseguró que comparten la intención de que Venezuela sea un país estable, donde prevalezca la paz y la democracia.
En el encuentro, que terminará el próximo jueves, están presentes 30 países observadores, dos de ellos mediante viceministros, y 25 organizaciones internacionales.
La conciliación entre el desarrollo económico y la inclusión social ha sido el punto principal en esta Asamblea de la OEA, en que también se ha unificado un mensaje hacia la comunidad internacional, de no sancionar a Venezuela, a propósito de las medidas injerencistas tomadas por Estados Unidos.