Los recolectores de la compañía de limpieza en Río de Janeiro (sureste de Brasil) recogieron este lunes 18 mil toneladas de desperdicios en menos de 24 horas, luego de que varios trabajadores pusieron fin a una huelga que tuvo lugar en pleno carnaval.
Al menos 3 mil basureros de los 15 mil de la ciudad, se movilizaron desde el pasado sábado para limpiar las calles y avenidas de la localidad que será escenario de la final de la Copa Mundial de Fútbol.
Un batallón de 150 empleados de la corporación Municipal de Limpieza Urbana (Comlurb) estuvieron a cargo de las labores de recolección que en el Sambódromo colapsaron al recoger 15,5 toneladas de basura.
Los huelguistas finalizaron la protesta después de un acuerdo entre el municipio de Río de Janeiro y Comlurb, que benefició a los empleados con el 37 por ciento de aumento salarial fijado en mil 540 reales al mes (unos 670 dólares).
"Estamos todos satisfechos porque no queríamos nada más que esto. Sentarnos, conversar y hacer nuestra propuesta", dijo Angelo Ricardo Freitas, representante de los trabajadores.
Es preciso recordar que el pasado dos de marzo, al inicio de la huelga, la empresa anunció el despido de 300 trabajadores, pero el alcalde dejó sin efecto la intención de Comlurb y el jueves seis, en las zonas de Copacabana y Botafogo reanudaron la limpieza.