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Rusia advirtió este sábado que tras la reciente violencia en Macedonia, que dejaron 22 muertos, está la intervención del Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) y sus aliados para desestabilizar ese país.
En un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, citado por la agencia de noticias Itar-Tass, indicó que "es más que evidente que la amenaza de caos en los Balcanes, una región que aún no se ha recuperado de la sangría de los 90, viene de fuera".
Asimismo, la cancillería argumentó que "la información publicada por los medios serbios sobre la detención de un ciudadano de Montenegro en Macedonia (...) es una prueba clara de los planes lanzados desde fuera para hacer saltar por los aires la situación política en este país e intentar lanzarlo al abismo de las revoluciones de colores".
De acuerdo a Rusia, la detención del ciudadano de Montenegro confirma que "quienes desde Occidente gestionan los escenarios más catastróficos prefieren que sean otros los que los provoquen".
El texto señaló que Montenegro es uno de los países "seducidos por la OTAN". Además, apunta que existen similitudes entre la situación de Macedonia con la de Ucrania.
También este viernes, el canciller ruso Serguéi Lavrov, no desestima que el recrudecimiento de la situación política en Macedonia tenga que ver con el rechazo a las sanciones contra Moscú, y a la vez su apoyo a la construcción del gasoducto ruso-turco Turkish Stream, informó Sputnik News.
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Exigen renuncia del primer ministro
Este domingo cientos de personas opositoras al Gobierno de Macedonia protestan en la capital del país, Skopie, para exigir la renuncia del primer ministro, Nikola Gruevski, a quien acusan de corrupción y de haber espiado telefónicamente a más de 20 mil personas, entre ellas dirigentes políticos, periodistas y autoridades religiosas.
Los protestantes son simpatizantes de la opositora Unión Social-Democrática de Macedonia (Foto: @Jelena_Milincic)
EN CONTEXTO
El pasado 10 de mayo hubo violentos choques en el norte de Macedonia que dejaron saldo de 22 personas muertas, entre ellas ocho policías y 14 miembros de un grupo armado de presunto origen albanés, según informaron fuentes oficiales.
El portavoz del Ministerio del Interior, Ivo Koteczki, dio a conocer que durante los hechos iniciados el sábado en la norteña ciudad de Kumanovo, cerca de la frontera con Kosovo, también resultaron heridos 37 agentes del orden.
Los hechos se produjeron en el medio de una crisis política que afecta al Gobierno tras la revelación de audios que evidencian los intentos de encubrir en 2011 el asesinato de un joven cometido por un agente del orden.
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