El Departamento de Estado norteamericano publicó el lunes la última de tandas de correos electrónicos de su extitular y actual candidata demócrata a la presidencia, Hillary Clinton, tras una orden judicial emitida a fines de febrero.
De acuerdo con medios internacionales, los correos contienen unas tres mil 800 páginas de mensajes; ninguno de ellos clasificado como de alto secreto.
Ante la ola de revelaciones, Clinton ha dicho que utilizar un servidor privado en el período 2009-2013, durante su gestión de gobierno como secretaria de estado fue un error.
>> Hillary Clinton niega uso indebido de correo electrónico.
Varios de los correos revelados sobre su gestión en el Departamento de Estado afectaron su campaña presidencial; debido a que generó dudas en materia de seguridad, transparencia y el manejo de información sensible sobre el ataque contra un complejo diplomático de Estados Unidos en Bengasi, Libia, en 2012.
Clinton ha tratado de liberarse de la controversia causada por su decisión de usar una cuenta privada de correo electrónico para asuntos de interés nacional. Ahora en plena víspera de la jornada conocida como supermartes, cuando se celebrarán primarias y caucus (asambleas populares) republicanas y demócratas en 12 estados fue expuesta una vez más por la ultima tanda de correos.
Uno de los correos mas polémicos fue el relacionado con el huracán Sandy, que impactó contra las costas de Nueva York y Nueva Jersey (noreste) el 29 de octubre de 2012, que obligó a la evacuación de miles de personas, y dejó un balance de 147 muertos y daños materiales por 50 mil millones de dólares.
La entonces secretaria de Estado mostró su enfado debido a que el fenómeno estropeó sus vacaciones, "Tengo muy mala suerte cuando se trata de coger vacaciones. ¡Dios no quiere que me relaje!", escribió textualmente a sus colaboradores más cercanos en una cadena de correos electrónicos.
Destaca además la comunicación entre Clinton y una de sus personas de mayor confianza, Sidney Blumenthal, en la que abordan el debate abierto dentro del Partido Demócrata en 2010 sobre la gestión del presidente Barack Obama.