El Gobierno de Colombia junto con las Fuerzas Armadas de Revolución Nacional- Ejército del Pueblo (FARC- EP) anunciaron este viernes un programa para combatir los cultivos ilícitos del país a través de la sustitución de 50 mil hectáreas.
El Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de uso Ilícito (Pinis) estará a cargo de la Alta Consejería para el Postconflicto, DD.HH. y Seguridad y contará con la participación de las fuerzas insurgentes.
El Pinis representa el inicio de la implementación del punto cuatro del Acuerdo Final de Paz, que busca la participación activa de las comunidades en los proyectos productivos para ala sustitución.
#LaPazAvanza transformando el campo. Con programa para sustituir cultivos ilícitos comunidades prosperarán con alternativas productivas https://t.co/zd3vNSvyj1
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) 27 de enero de 2017
"La meta es sustituir aproximadamente 50 mil hectáreas de cultivos de uso ilícito en más de 40 municipios de los departamentos más afectados", explicó el comisionado del Postconflicto colombiano, Rafael Pardo, quien también informó que esos territorios tienen más del 50 por ciento de siembras de coca en el país.
Pardo también añadió que el Gobierno del presidente colombiano de Juan Manuel Santos invirtió en el programa unos 340 millones de dólares en el programa, el cual beneficiará a 50 mil familias según declaraciones del Ejecutivo.
Necesitamos construir la paz entre todos porque la guerra nos pasó a todos. Nos merecemos la oportunidad de vivir en paz #LaPazAvanza �� pic.twitter.com/d3Fo30oL1q
— Paula Gaviria (@PaulaGaviriaB) 18 de enero de 2017
"Sin renunciar a la erradicación forzosa el Gobierno Nacional aspira a que esta alternativa sea el instrumento predominante de reducción de cultivos de uso ilícito", enfatizó Pardo quien agregó: "La inversión en sustitución voluntaria produce resultados sostenibles, genera oportunidades territoriales e incide en la calidad de vida".
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El conflicto en Colombia enfrentaba al grupo insurgente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, quienes luchaban por el derecho a las tierras entre otras cosas, contra grupos paramilitares y militares de Gobiernos opresores. Cerca de 53 años duró este conflicto que dejó un saldo de más de 200 mil muertos.