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  • El presidente guatemalteco designó a un equipo de ministros para que cumplan su agenda en Londres (Foto:Archivo)

    El presidente guatemalteco designó a un equipo de ministros para que cumplan su agenda en Londres (Foto:Archivo)

Publicado 2 mayo 2014



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El presidente Otto Pérez Molina, anunció este viernes la suspensión de su visita a Londres, prevista para la próxima semana, para estar presente en el proceso de elección del fiscal general, que ha causado polémica en el país por la exclusión de la lista de candidatos de la actual titular, Claudia Paz.

“(...). Creo yo es más importante en este caso atender un tema tan delicado como es el nombramiento del fiscal general”, dijo Pérez Molina, tras entrevistar a los seis candidatos al puesto.

El mandatario guatemalteco tenía programado visitar la nación británica para reunirse con funcionarios del Gobierno y participar en un foro sobre drogas en una universidad londinense, pero designó a un grupo de ministros encabezados por el canciller, Fernando Carrera para que cumplan con su agenda.

Con respecto al nombramiento del próximo fiscal, Pérez Molina dijo que elegirá una vez transcurrido el plazo de 72 horas establecidas por la ley para presentar impugnaciones a los candidatos presentados ante el Ejecutivo por la comisión postuladora que excluyó de la lista a Paz, aspirante a la reelección.

El jefe de Estado, no comentó sobre la exclusión de Paz de la nómina final, pero aclaró que la comisión postuladora es la que debe explicar. “A veces uno no termina de entenderlo, pero así es el trabajo”, refirió.

En febrero pasado, la Corte de Constitucionalidad de Guatemala avaló un recurso de un abogado y determinó que el periodo de cuatro años de Paz concluye en mayo y no en diciembre como estaba previsto.

Paz ha recibido el apoyo de organismos de derechos humanos que consideran labor de Paz como clave para depurar la justicia y en contra de la impunidad.

Durante su gestión se han impulsado procesos contra militares involucrados en crímenes de lesa humanidad durante la guerra civil que vivió este país por 36 años (1960-1996).

El caso más relevante fue el juicio contra el dictador Efraín Ríos Montt, quien en 2013 fue condenado a 80 años de prisión por una jueza, tras hallarlo culpable de genocidio, aunque la sentencia fue anulada días después por la Corte de Constitucionalidad.


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