Piedad Córdoba confía que Gobierno dialogará con ELN antes de balotaje

A propósito de llevarse a cabo el próximo domingo 15 de junio la segunda vuelta electoral por la presidencia en Colombia, la defensora de los Derechos Humanos, Piedad Córdoba, expresó confiar en que el gobierno pueda iniciar un diálogo con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y con los remanentes del Ejército Popular de Liberación (EPL), con el fin de aunar más grupos insurgentes en torno al fin del conflicto armado.

Piedad Córdoba, en conjunto con las organizaciones Colombianas y Colombianos por la Paz y Frente Amplio para la paz, dio a conocer este jueves su apoyo a la campaña por la reelección del presidente y candidato Juan Manuel Santos, quien a su juicio representa la opción de la paz por impulsar los diálogos con las FARC en Cuba.

Santos se enfrentará en las urnas contra el representante del uribismo, Óscar Iván Zuluaga, quien en diversas declaraciones ha prometido endurecer las condiciones del proceso de paz.

"Queremos hablarle al ELN así como al EPL de la importancia de comenzar" una negociación, afirmó la exsenadora liberal. Y agregó: "Confiamos que antes del 15 de este mes Colombia pueda tener esa gran noticia de que comienza esta mesa de discusión y de debate" con estos grupos insurgentes.

Por su parte, los líderes del ELN han expresado su voluntad de negociar con el Gobierno de Santos desde que comenzaron los diálogos con las FARC, en noviembre de 2012, y aunque el Ejecutivo ha aceptado la invitación, no se conocen contactos oficiales.

Desde entonces se ha especulado con la posibilidad de que varios países latinoamericanos puedan servir de escenario para estos diálogos, sobre lo que Córdoba no se pronunció porque "lo más importante es que puedan comenzar donde sea, en cualquier lugar del planeta".

Por otro lado, es válido recordar que el Epl se desmovilizó parcialmente en 1991 pero que aún quedan reductos que han operado recientemente en la zona del Catatumbo, en la frontera colombo-venezolana, y que de acuerdo con las autoridades están más dedicados al narcotráfico que a la defensa de sus ideas insurgentes.