El historiador brasileño Marco Aurelio García que fue asesor de Asuntos Internacionales en los Gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff falleció este jueves a los 76 años víctima de un infarto, informaron fuentes políticas.
Durante las gestiones de Lula y Rousseff, García fue un hombre clave en la política exterior de Brasil y en especial en todo lo relacionado con América Latina, región a la que dedicó gran parte de su vida política.
En 2014 @ItamaratyGovBr dijo "violencia Israel-Palestina", M. A. Garcia (1941-2017) gritó: "Por amor de Dios, es un genocidio, una masacre!" pic.twitter.com/zYKUu8Va5r
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) 20 de julio de 2017
García que era amigo cercano del expresidente Lula sufría de problemas cardíacos y se atribuye su muerte a un ataque fulminante al corazón según informó el presidente del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffman.
Fue profesor de historia retirado de la Unicamp y se graduó en filosofía y derecho en la Universidad Federal de Rio Grande do Sul. Comenzó la vida pública como concejal en Porto Alegre en la década de 1960, en el antiguo Partido Republicano.
Durante la dictadura en Brasil se exilió en Chile y Francia, al regresar a Brasil en 1979, ayudó a fundar el PT y estuvo vinculado con los pensadores de izquierda de Brasil, además fue fundador del grupo de países con economías emergentes BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
La semana pasada el historiador asistió al acto de solidaridad con el expresidente Lula organizado por el PT para apoyar al exmandatario ante las acusaciones y posterior condena por supuesta corrupción.
Falleció M. Aurelio Garcia (76 años). Fue asesor de Lula y figura clave en la construcción de BRICS y Unasur.https://t.co/L7X9GMk8ka
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) 20 de julio de 2017
García sostuvo que el PT debe ser un "partido más firme y con una mayor disposición para hacer frente a los grandes retos para aclarar y movilizar a la sociedad para hacer frente a las dificultades de Brasil".
Agregó que las dificultades de Brasil son "enormes" y la agenda es amplia, afirmó que hacer frente a los retos no es sólo una fiesta de tareas sino un conjunto de fuerzas políticas, para él "el PT tendría que ser un partido unificado pero no por medios burocráticos sino por el debate".