Tras 12 días de protestas en 17 regiones de Colombia, la organización Congreso de los Pueblos ratificó la continuidad del paro agrario hasta conseguir un diálogo satisfactorio con el Gobierno de Juan Manuel Santos.
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A través de un comunicado, la alianza, que fue una de las promotoras del paro, reiteró su petición de instalar la mesa única de concertación, en la que representantes de todos los sectores campesinos se sienten a discutir sus propuestas con los funcionarios gubernamentales.
Desde que la Minga Agraria, Étnica y Popular inició los manifestantes indígenas, campesinos y afrodescendientes han salido a las calles y bloqueado varias carreteras en todo el país, a modo de presión, para conseguir la atención del Gobierno, que los ha ignorado por años.
El Ejecutivo exige que despejen estas carreteras como condición sine qua non para profundizar en los debates, pero no habla sobre las causas de las manifestaciones y qué hacer para solventarlas.
Desbloquearán vía al sur pero la Minga sigue
Pese a la desconfianza de los campesinos e indígenas ante la seuda voluntad del Estado para "negociar", estos decidieron abrir temporalmente la Panamericana, uno de los principales corredores viales y comerciales al sur de Colombia, como un gesto dirigido a demostrar su intención de diálogo.
Así lo recalcó el Congreso de los Pueblos en su comunicado: "Nos jugamos el futuro del país, queremos que la comunidad entienda que lo que exigimos son mejores condiciones para trabajar en el campo".
La Panamericana estará despejada por 36 horas, quedará por parte del Estado atender los compromisos pendientes de los mingueros y garantizarles su seguridad y estabilidad, para que de esta forma el paro pueda levantarse definitivamente, pero por el momento el lema es que la minga sigue y el paro crece hasta lograr el diálogo.
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