Fuerzas del Gobierno israelí atacaron este miércoles por la mañana a palestinos que intentaban entrar a la Mezquita Al-Aqsa, dejando al menos 20 heridos.
Militares israelíes, apoyados por un grupo de ultranacionalistas judíos, usaron grandes cantidades de bombas sónicas y balas de goma contra los palestinos.
Según los guardias de la Mezquita Al-Aqsa, decenas de fuerzas del Gobierno de Israel han irrumpido en el lugar para desalojar a los fieles musulmanes, la mayoría de ellos ancianos.
El director del Waqf, oficio de bienes religiosos musulmanes, de Al-Quds (Jerusalén), El Sheij Azam al-Jatib, denunció, por su parte, la intrusión y la profanación de la mezquita por los israelíes.
Los testigos informaron que tras pasar media hora de enfrentamientos, las fuerzas israelíes permitieron el ingreso de un médico y una enfermera al lugar para atender a dos personas gravemente heridas.
La Mezquita Al-Aqsa es un lugar de suma importancia para los musulmanes. El régimen israelí, que se considera a sí mismo el principal propietario de los territorios palestinos, desde el inicio de su ocupación, sueña con destruirla, a fin de transformarla en un templo judío.
El pasado 29 de octubre el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) resolvió reunirse para discutir los amplios proyectos de construcción que el Gobierno de Israel continúa en territorio palestino.