El número de turistas extranjeros que pernoctó en Francia en el primer semestre del año descendió en un 10 por ciento, así lo informó el secretario de Estado del sector Turismo, Matthias Fekl, quien atribuyó esta baja al miedo que genera que ocurran nuevos atentados terroristas en la nación europea.
Fekl detalló al respecto que quienes han "reaccionado de forma clara a los atentados" han sido los turistas de mayor poder adquisitivo, lo que ha propiciado que sean los hoteles de alta categoría los que sientan en gran medida esta caída.
El secretado subrayó que la región más afectada ha sido París, donde se ha registrado un incremento en este sector de apenas el 2 por ciento.
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El panorama no pinta favorable porque la tendencia de caída prosiguió durante el mes de julio, agregó Fekl, quien además aportó que hasta ahora el 80 por ciento de los turistas son europeos, incluyendo británicos, que pese al brexit, no han anulado sus vacaciones en Francia.
No obstante, el funcionario indicó que Francia desea mantenerse como primer destino del mundo, por lo que aseguró que el Gobierno seguirá invirtiendo para modernizar la oferta turística. Específicamente se refirió a las medidas anunciadas para sustentar el turismo en la Costa Azul, un región de los Alpes Marítimos, cerca de Niza, donde ocurrió un atentado terrorista el pasado 14 de julio.
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Los trabajadores también tienen miedo
La Torre Eiffel (ubicada en París, la región más afectada por el descenso del turismo según Fekl) fue evacuada este viernes por la noche a causa de un error, luego de que un empleado confundiera una simulación interna de incidente con una amenaza real.
"Se trataba de un ejercicio de simulación interno, como se hacen decenas cada semana, que acabó mal. Hubo un empleado que pensó que era real. Y la Torre Eiffel fue evacuada", contó la fuente policial.
Aunque las autoridades resaltaron la incomprensión del empleado y descartaron la hipótesis que se manejaba de un supuesto paquete sospechoso; lo cierto que es que en el clima de tensión en que se encuentra la nación europea es normal que el empleado confundiera la ficción con la realidad y creyera que el monumento, símbolo de París inaugurado en 1889, sea un objetivo para las organizaciones terroristas.
Según la sociedad que gestiona el monumento, cerca de 250 millones de personas han visitado la torre, y cada día miles de turistas se niegan a irse de Francia sin al menos estar cerca de la estructura.
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