A diferencia de otros niños heridos durante las agresiones sionistas, a estos niños se les impide recibir atención médica fuera de Gaza, ya que sus condiciones son evidencia del uso deliberado de Israel de armas prohibidas, como el fósforo blanco y el uranio empobrecido, contra la población civil.
Como consecuencia de los últimos ataques de israel, a Gaza, según los socorristas locales, 1.867 palestinos murieron y más de 9.500 resultaron heridos. Según los últimos informes del Banco Mundial, el bloqueo y la continua destrucción de la infraestructura en los ataques de Gaza han aumentado el desempleo al 60 %.
Para la Oficina de Naciones Unidas la inmensa mayoría, (1.312, o sea 86% del total) son civiles, incluyendo a 408 niños y adolescentes y a 214 mujeres. Según el FMI, la tasa de desempleo sobrepasa el 40% en la Franja de Gaza, territorio sometido desde 2006 a un bloqueo israelí. Más del 70% de la población depende de la ayuda humanitaria en tiempos normales, según la ONG israelí Gisha.
LA RAZÓN