El defensor de derechos humanos y consejero de paz, Zabier Hernández, indicó este lunes que las acciones del Gobierno colombiano en Tumaco, en el departamento de Nariño (suroeste), profundiza la desconfianza de la población en el Estado y "está minando la esperanza de la paz que tienen los campesinos".
Hernández recordó que en febrero, el Gobierno anunció su plan de incentivo para la sustitución integral de cultivos ilícitos, pero existe "una contradicción en la política del Gobierno" por lo que pasó en Tumaco, ya que "en marzo firmaron los acuerdos y en abril hubo erradicación forzada", indicó durante el programa Paz por Lozano, transmitido por teleSUR.
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Además, indicó que los campesinos acuden a la siembra de la coca como su único recurso de subsistencia por varios factores que caracterizan a la zona, como la "pobreza estructural" en ese sector donde "no hay carreteras, no hay servicio de salud, no hay educación".
El segundo factor es la "ausencia total del Estado en su dimensión integral. La única presencia que conocen los campesinos, afrodescencientes e indígenas en esta zona, es la presencia militar, que llega esporádicamente cuando se definen las políticas antidrogas, de militarización de los territorios".
Y el tercer factor, según Hernández, es que desde la dejación de las armas por el ahora partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), "de su integración e inicio del proceso de incorporación a la sociedad civil, estos territorios quedaron a la deriva. El Estado no fue capaz de llegar con una presencia integral y suplir al Estado que había antes".
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Asimismo, afirmó que en el informe publicado por la misión de verificación que asistió a Tumaco para evaluar el lugar donde ocurrió la masacre el pasado 5 de octubre, se comprobó que era falso "que la misión haya querido ingresar a la base antinarcóticos. No es cierto que hayamos ingresado sin hablar antes con la fuerza pública".
"La explicación de los indígenas, de los afrodescencientes y de los campesinos es que ahí, en ese sitio, hay por lo menos seis muertos más enterrados" por lo que las fuerzas de seguridad no le permitieron la entrada a la misión de verificación, manifestó.
Hernández aseguró que se ha incrementado la siembra de coca en el país y recordó que el departamento de Nariño es uno de los más grandes productores con 43.000 hectáreas, de los cuales "23.000 están en Tumaco y, en donde ocurrió la masacre, por lo menos hay 17.000".