El presidente de Bolivia, Evo Morales, conmemoró este domingo los 80 años del cese de hostilidades de la Guerra del Chaco, que enfrentó a Bolivia y Paraguay entre 1932 y 1935, en un acto público llevado a cabo en Villa Montes, ubicado en la región sureña de Tarija, al tiempo que lamentó la ausencia de su homólogo paraguayo, Horacio Cartes, quien no pudo asistir por problemas climatológicos.
El mandatario atribuyó la contienda a las petroleras Estándar Oil de Estados Unidos, afincada en Bolivia, y la Shell que representaba a Inglaterra y Holanda, en Paraguay, por el control del negocio de los hidrocarburos.
“Si hacemos una profunda evaluación con seguridad no ha sido una guerra de los pueblos de Paraguay con Bolivia, la historia demuestra que el 31 de julio de 1932 entre el Ejército de Paraguay y Bolivia comenzaron esa guerra pero a la cabeza y provocadas por las petroleras”, manifestó el presidente.
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En este sentido, el mandatario defendió las nacionalizaciones de los recursos naturales que ha autorizado en su gestión porque gracias a estas políticas la economía boliviana ha crecido.
Por su parte, el embajador paraguayo en Bolivia, Julio César Vera, destacó que a 80 años del cese de hostilidades, Bolivia y Paraguay han enterrado para siempre las banderas de guerra y consideró que "eso se magnifica por la excelente relación que existe entre ambos países y sus presidentes”.
En contexto
Durante la Guerra del Chaco, Bolivia movilizó 250 mil soldados y Paraguay 120 mil. Muchos historiadores afirman que unos 50 mil bolivianos perdieron la vida, mientras que en Paraguay el número de bajas alcanzó los 40 mil.
El 12 de junio de 1935 se suscribió en la Argentina el protocolo que dio fin a la Guerra del Chaco y el 14 de ese mes cesó el fuego.
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