Los estudiantes universitarios chilenos anunciaron este jueves que mantendrán las movilizaciones de calle en el país hasta que se concrete la tan anhelada reforma educativa que puso en 2011 en jaque al expresidente Sebastián Piñera y obligaron a implementar los cambios en la educación como una prioridad en la agenda nacional.
Las presidentas de las federaciones estudiantiles de las universidades de Chile y Católica, Melissa Sepúlveda y Naschla Aburman, respectivamente, aclararon que están abiertos a dialogar con el nuevo gobierno de Michelle Bachelet, quien asumió la presidencia en su segundo mandato el martes, y prometió una reforma profunda a la educación que garantice la gratuidad en todos sus niveles, que será financiada con un alza de los impuestos a las empresas.
"Esperamos antes que nada entender lo que quieren hacer (el Gobierno) por la ambigüedad del programa. Nos preocupa la letra chica que puede cambiar la reforma estructuralmente", afirmó la dirigente estudiantil Naschla Aburman en una reunión con la prensa internacional, pero precisó que paralelamente los estudiantes mantendrán sus movilizaciones porque "no se van a generar los cambios si no los exigimos".
"Este es un Gobierno que genera altas expectativas pero la mayoría de la población no cree que se van a producir las reformas", afirmó por su parte Melissa Sepúlveda, de la Universidad de Chile.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, aseguró el miércoles que cumplirá con cada una de sus promesas a fin de ver un país lleno de oportunidades.
Al mismo tiempo, reconoció que la nación enfrenta un escenario económico más complejo del que esperaba. "Estoy al tanto de la situación que enfrenta mi país es materia económica, mi compromiso es hacer cumplir leyes que beneficien a la población", dijo.
En Chile la educación primaria y secundaria es pública y privada, mientras que la universitaria es pagada incluso en las casas de estudio financiadas por el Estado. Las dirigentes no precisaron cuándo se reanudarán las movilizaciones pero aseguraron que las federaciones universitarias, agrupadas en la Coneferación de Estudiantes de Chile (Confech), no se han adherido a una primera protesta convocada por organizaciones sociales para el próximo 22 de marzo.
Asimismo, dijeron que aún no han tenido ningún contacto con el nuevo ministro de Educación, el economista Nicolás Eyzaguirre, quien será el encargado de liderar el proceso de reforma a la enseñanza planteado por Bachelet.