Escocia, nación bajo dominio del Reino Unido, se encuentra a poco más de cuatro meses de celebrar los comicios que le permitirán a la ciudadanía determinar la independencia total de su territorio.
Pese a que desde medios británicos se ha hecho un seguimiento minucioso del proceso; y algunos expertos dan como un hecho que Escocia será un país completamente independiente; fue hasta hace pocos días que la población tomó un rol participativo en las campañas.
A diferencia del proceso independentista que se maneja desde Cataluña (noreste de España), poca había sido la actividad política en relación con el proceso; para el cual se realizó una distribución de trípticos informativos sobre los cambios que afrontaría Escocia de llegar a convertirse en una nación del todo independiente.
En los últimos días el pueblo escocés comenzó a organizar asambleas para explicar a la gente interesada los beneficios y consecuencias de que Escocia pueda convertirse en un país soberano a partir del 19 de septiembre.
Al respecto, el Primer Ministro del Reino Unido, David Cameron, se pronunció el jueves en relación con el proceso electoral de septiembre; punto en donde insiste que Escocia debe permanecer bajo dominio británico.
“Es muy importante, si quieren más autonomía, que voten 'no'. votar 'sí' es el fin de la autonomía y el principio de una separación irreversible” expresó ante los medios de comunicación.
De igual forma recordó que los partidos político dominantes del Reino Unido (Partido Conservador, Laborista y Liberal Demócrata) prometieron mayor autonomía a Escocia mientras se negasen a la independencia absoluta.
En este punto recalcó que él (Cameron), es un hombre de palabra; por que lo que cumplió con su promesa de ampliar las competencias a Gales e Irlanda del Norte.