Es un ser infame, afirma hija del represor argentino Etchecolatz

Mariana D., hija del genocida argentino Miguel Etchecolatz, describió a su padre como "un ser infame, no un loco. Un narcisista malvado sin escrúpulos". 

En una entrevista para la Revista Anfibia, Mariana contó que participó en la marcha en contra del fallo de la Corte Suprema que beneficiaba a los condenados por delitos de lesa humanidad, entre ellos su padre, con el cómputo de la condena por el 2x1.

La mujer, que cambió su apellido hace un año, dijo que Etchecolatz nunca quiso a su familia: "Aparentaba tener una familia, pero nos tenía asco y era encantador con los de afuera".

Mariana rompió el silenció en la entrevista con Juan Manuel Mannarino, a quien admitió que dejó de vivir con Etchecolatz cuando cayó preso por primera vez en 1984. "Al principio lo visitábamos, pero después mi madre, María Cristina, pudo decirle en la cara que íbamos a dejar de verlo". 

Acerca de la situación actual del represor Etchecolatz, Mariana indicó: "Me temo que aún sigue sosteniendo poder desde la cárcel, no es un ningún viejito enfermo, lo simula todo".

La hija del represor mencionó que su madre se volvió a casar y se fue al exterior. Sus hermanos rearmaron su vida y se fueron a vivir al interior del país.

La Cámara de Casación Penal otorgó el 28 de abril la prisión domiciliaria al represor argentino, Miguel Etchecolatz, que no se hará efectiva todavía debido a que el exdirector de Investigaciones de la policía de Buenos Aires tiene otras causas pendientes. 

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