El papa Francisco en la II Conferencia Internacional sobre Nutrición (CIN2) que se realiza en Roma, Italia, condenó este jueves la especulación con los alimentos y la codicia de ganancias como un mecanismo que socava la lucha global contra la pobreza y el hambre.
En su intervención, el Papa pidió a los países ricos compartir con los más desfavorecidos, al tiempo que denunció el derroche, el consumismo y la desigual distribución de la riqueza.
"Duele constatar además que la lucha contra el hambre y la desnutrición se ve obstaculizada por la prioridad del mercado y por la preminencia de la ganancia, que han reducido los alimentos a una mercancía cualquiera, sujeta a especulación, incluso financiera", señaló el pontífice.
“Y mientras se habla de nuevos derechos, el hambriento está ahí, en la esquina de la calle, y pide carta a la ciudadanía, ser considerado en su condición, recibir una alimentación de base sana. Nos pide dignidad, no limosna”, agregó el Papa, al tiempo que condenó la “paradoja de la abundancia”, es decir, se producen suficientes alimentos para todos, pero no todos pueden comer.
Líderes y representantes de más de 190 países y organismos internacionales se encuentra desde el miércoles en Roma, Italia, en la II Conferencia Internacional sobre Nutrición de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO).
La FAO señaló que la conferencia propuesta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) busca responder a los desafíos nutricionales actuales e identificar las prioridades para mejorar la cooperación internacional en materia de nutrición.
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