Nueve personas murieron este viernes en Nigeria tras dos explosiones perpetradas por mujeres suicidas, una anciana y una niña de 10 años, en la ciudad de Damaturu (noreste), en medio de la celebración del Ramadán.
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El coronel Sani Kukasheka Usman precisó que en la primera explosión fallecieron 4 personas murieron y otras 7 resultaron heridas, mientras que en la segunda, hubo cinco decesos y 11 resultaron heridas, lo que totaliza 9 fallecidos y 18 heridos.
De acuerdo con el militar, la primera detonación se registró a las 07:40 local (06:40 GMT), en un puesto de control de seguridad instalado a propósito de que miles de fieles se reunirían para celebrar el fin del mes de ayuno, en el Ramadán.
Los hechos ocurrieron luego de que este jueves 49 personas fallecieran en otro atentado registrado en el mercado de Gombe, durante los preparativos de la fiesta.
A pesar de que estos atentados no han sido reivindicados por el grupo Boko Haram, se cree que pueda ser responsable.
En contexto
La primera semana de julio, 260 personas fueron asesinadas en una oleada de atentados, específicamente en la zona norte, bastión del grupo armado Boko Haram. En las últimas tres semanas de junio, los extremistas reanudaron su campaña de atentados y han matado a unas 150 personas en ataques suicidas en Borno.
El grupo radical Boko Haram es una amenaza para el país desde 2009 y ha intensificado sus ataques terroristas durante los últimos meses del año, tras perder el territorio ganado en 2014 a causa de la ofensiva militar de tropas aliadas en Chad, Nigeria y Níger.
En mayo tuvo que huir del bosque de Sambisa debido a un operativo en su contra para rescatar a 200 niñas secuestradas por el grupo. Hasta la fecha ha asesinado a unas 13 mil personas y causado el desplazamiento de más de un millón por diversos atentados perpetrados en el país.