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Indígenas guatemaltecos denunciaron la desaparición de cinco de sus semejantes -incluídas dos mujeres- los cuales son opositores a la construcción de una hidroeléctrica en el norte del país.
"Este ataque (desalojo) a (la aldea) Monte Olivo deja como saldo varios heridos y cinco miembros de la comunidad desaparecidos, quienes supuestamente fueron capturados por la Policía, pero de quienes no se conoce su paradero", indicó en un comunicado la organización indígena maya Ut'z Che'.
El violento desalojo ocurrió luego de que unos 700 policías arribaran a la comunidad y les lanzaran gases lacrimógenos, según los denunciantes.
La localidad de Monte Olivo encabeza la resistencia a la construcción de la Hidroeléctrica Santa Rita, de inversión guatemalteco-hondureño, en Cobán, unos 300 km al norte de la capital.
Los indígenas rechazaron el acuerdo entre el presidente Otto Pérez y varias comunidades de Cobán de la semana pasada y aseguran haber sido víctimas de ataques por su resistencia al proyecto.
"Estas agresiones del Estado están precedidas por ataques violentos de la compañía, quien está detrás del asesinato de dos niños de la comunidad, que fueron ejecutados a sangre fría con arma de fuego", asegura la entidad indígena.
En ese sentido, los indígenas afirman que el Ejecutivo y el Estado "no han cumplido con su deber de hacer una consulta previa, libre e informada de este proyecto".
Varios movimientos sociales, entre los que destacan ambientalistas, campesinos e indígenas, mantienen un firme rechazo a la construcción de megaproyectos como hidroeléctricas y explotación de minerales en Guatemala.
