La capital de Francia, París, acoge este sábado una cumbre africana para debatir una estrategia común a fin de combatir al grupo islamista nigeriano Boko Haram, responsable del secuestro de más de 200 jóvenes hace un mes, así como por atacar este viernes un campo de trabajadores chinos en Camerún.
Autoridades camerunesas informaron que “un chino murió" y otros 10 "fueron probablemente secuestrados" en la noche del viernes en un ataque atribuido a este grupo islámico contra un campo de trabajadores del sector viario en el norte de Camerún.
"Los Boko Haram estaban fuertemente armados. Vinieron con cinco vehículos", afirmó un responsable administrativo de Waza, localidad cercana al campamento de los trabajadores chinos, citado por la agencia AFP.
Esta nueva operación de Boko Haram aumenta la presión en la cumbre de París, en la que participa el presidente nigeriano, Goodluck Jonathan, cuya estrategia para combatir Boko Haram se cuestiona cada vez más.
Jonathan, que llegó al Elíseo a las 10H00 GMT, acogió posteriormente junto al presidente francés, François Hollande, a sus homólogos de Camerún, Níger, Chad y Benín, así como a los representantes de Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea.
"Plan global"
En su intervención en la cumbre, Hollande hizo un llamado a los participantes a aplicar un "plan global" contra los islamistas. "Boko Haram se ha convertido en una amenaza mayor para el conjunto de África occidental, y ahora de África central", donde "están demostrados sus vínculos con grupos terroristas" islamistas.
Por su parte, el ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, dijo que "es importantísimo que Nigeria se tome con seriedad sus responsabilidades", a forma de crítica contra el presidente nigeriano, quien reaccionó al secuestro de las jóvenes semanas después del hecho.
La cumbre se celebra un mes después del secuestro de más de 200 muchachas estudiantes por parte de Boko Haram, un hecho que suscitó una gran conmoción en todo el mundo.