Rusia envió un convoy humanitario de más de dos mil toneladas para socorrer a la población del este de Ucrania.
Entre los artículos enviados figuran ante todo alimentos, entre ellos 400 toneladas de cereales, 100 toneladas de azúcar, 62 toneladas de alimentos para bebés, así como 54 toneladas de equipo médico y medicamentos, 12 mil sacos de dormir y 69 generadores de energía.
El miércoles, Ucrania impidió el paso del convoy a través de la región de Járkov.
Kiev considera que Rusia intenta enmascarar una posible intervención, una posibilidad que el Ministerio ruso de Asuntos Exteriores tacha de "absurda".