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Los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016 harán historia este año porque, por primera vez en unas olimpiadas, se incluirá un equipo de refugiados: 10 personas originarias de Oriente Próximo y de África desfilarán bajo la bandera olímpica con la satisfacción de haber logrado una simbólica victoria incluso antes de que los juegos comiencen.
Este es un "tributo a la valentía y la perseverancia de todos los refugiados (capaces de) sobreponerse a la adversidad y de construir un futuro mejor para ellos y sus familias", manifestó Filippo Grandi, el Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los Refugiados (Acnur).
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Estas son los 10 atletas que participarán en Río 2016 en nombre de los más de 59,5 millones de desplazados y refugiados, según ONU:
Rami Anis: el refugiado sirio de 25 años de edad participará en la categoría de 100 metros mariposa. El huyó de Alepo a Turquía. Pero al no poder competir, cruzó en bote hinchable a la isla griega de Samos y continuó hasta Bélgica, donde ahora entrena nueve veces a la semana.
Yolande Mabika: la desplazada por causa de la guerra en la República Democrática del Congo participará a sus 28 años de edad en la disciplina de judo. Ella fue separada de sus padres a muy corta edad y vivió en campamentos para desplazados donde descubrió su pasión por el deporte y empezó a participar en competencias internacionales. Sin embargo, huyó a Brasil cansada del racionamiento de alimentos y de que la encerraran cuando perdía combates.
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Paulo Amotun Lokoro: el desplazado de Sudán del Sur de 24 años participará en la categoría de atletismo en la distancia de 1.500 metros. Desde que nació no conoció más que guerra. Cuando huyó a Kenia, y descubrió lo que eran unos zapatos deportivos, encontró su pasión por correr.
Yusra Mardini: la refugiada siria de 18 años de edad participará en natación en la categoría de los 200 metros libres. Ella ya había participado en las Olimpiadas de 2012 bajo la bandera de Siria, pero ahora lo hará bajo la bandera de los refugiados. Ella huyó a Alemania, cruzando el mar entre Turquía y la isla griega de Lesbos en una embarcación llena de otros sirios desperados que ni quiera sabían nadar, según su relato.
Yiech Pur Biel: el atleta de 21 años de edad de Sudán del Sur correrá los 800 metros en Río 2016. El desplazado por la guerra que creció con las condiciones mínimas para vivir quiere demostrar que la oportunidad y la esperanza para vivir pueden venir a través del estudio, pero también a través del deporte.
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Rose Nathike Lokonyen: la desplazada sursundanesa de 23 participará en la carrera de 800 metros. En tan solo un año pasó de no tener entrenador ni material deportivo profesional en su país de asilo, Kenia, a competir en los Juegos Olímpicos como atleta.
Popole Misenga: el refugiado de la guerra en República Democrática del Congo, de 24 años de edad, participará en la categoría de judo. Su familia se separó de él y lo ocultó en un bosque para darle una oportunidad de vivir. Un centro para niños desplazados de la capital, Kinshasa, lo rescató y allí descubrió este deporte, que más tarde le ayudó a soportar los abusos de sus entrenadores. Ahora se encuentra viviendo en Brasil.
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Yonas Kinde: el maratoniano etíope de 36 años de edad, y que ahora vive en Luxemburgo, participará en Río 2016 para decirle a sus compañeros refugiados que a pesar de todo, no tienen límites para lograr lo que deseen.
Anjelina Nadai Lohalith: la desplazada de Sudán del Sur, de 21 años de edad, participará en altletismo en la carrera de 1.500 metros. La refugiada de Kenia huyó desde muy pequeña y no ha podido hablar con sus padres desde los seis años de edad, aunque dice saber que ellos están vivos todavía.
James Nyang Chiengjiek: el sursundanés de 28 años de edad también participará en atletismo. A los 13 años huyó a Kenia para evitar convertirse en un niño soldado y allí conoció su pasión por correr. El insta a no olvidar a aquellos que se han quedado atrás y que aún luchan por una tener una mejor vida de la que tienen.
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