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Este jueves, cientos de estudiantes españoles estuvieron en una huelga con protestas en el centro de Madrid contra la política educativa del Gobierno del Partido Popular y los recortes de becas.
La huelga, que los organizadores calculan con un 80 por ciento de cumplimiento, cuenta con los alumnos de los centros de secundaria y de las universidades, apoyados por los principales sindicatos de la enseñanza pública. El cálculo de aceptación fue de un 75 por ciento en las universidades de Madrid, Valencia, Barcelona, Granada y Salamanca.
La movilización fue encabezada por la Federación de Asociaciones de Estudiantes Progresistas (Faest), Estudiantes en Movimiento (EEM) y la Plataforma de Afectados por las Tasas (PAT), que mostraron su rechazo a la Ley Orgánica para la Mejora Educativa (Lomce), los recortes de presupuesto y al nuevo sistema de becas instaurados por el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert.
Los estudiantes marcharon desde la plaza de Neptuno hasta el Ministerio de Educación. El lema de los manifestantes fue: “La educación pública es un derecho y no un privilegio; la educación pública no se vende, se defiende”.
De su parte, el presidente de Faest, Fidel González, expresó en un mensaje que “los estudiantes no podemos seguir aguantando que este Gobierno siga recortando nuestros derechos y nuestras becas, sin que nosotros hagamos nada”. “La gota que ha colmado el vaso ha sido el grave retraso en el pago de las becas y los recortes de las mismas, que dejan a miles de estudiantes en una situación límite”, afirmó.
Un manifiesto leído al término de la manifestación frente al Ministerio de Educación denunció la falta de respuesta a gran cantidad de solicitudes de becas, la aprobación de otras con muy bajo financiamiento y el rechazo de algunas que cumplían con los requisitos.
La declaración también pide la derogación de la Lomce, por considerarla retrógrada e injusta y demandaron el fin de los recortes de las becas. También, consideran que la ley crea universidades de primera, con cursos rentables para el mercado laboral, y de segunda, como una red periférica y subsidiaria y sin inversión.
La Lomce incrementa las tasas universitarias, reduce la capacidad de decisión de las autonomías, que tienen transferidas las competencias en la instrucción estatal, suprime la selectividad e introduce exámenes de reválida al final de cada ciclo.
El pasado 20 de abril, representantes de Sindicato de Estudiantes y la Plataforma de Afectados por las Becas entregaron una carta al ministro del ramo, José Ignacio Wert, en la que denunciaban la “nefasta política” en materia de becas y calificaban de “inadmisible” la “tardanza en la notificación y posterior entrega de las becas que corresponden a los estudiantes y que ya les han sido asignad
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